ESTRASBURGO.- El Parlamento Europeo aprobó en Estrasburgo una resolución contra el racismo en el fútbol, en la que pide a la UEFA que introduzca sanciones deportivas, incluida la exclusión de los clubes de las competiciones.
Un total de 423 miembros, de los 732 que conforman el Parlamento Europeo, firmaron la declaración redactada que se convirtió en una resolución oficial.
De acuerdo con este documento, el Parlamento Europeo "alaba el excelente trabajo que las organizaciones, incluida la UEFA y la FARE (Fútbol contra el Racismo en Europa), han llevado a cabo sobre este problema".
Los eurodiputados piden a la UEFA y, a los demás organizadores de competiciones en Europa, que aseguren que los árbitros tengan la opción, conforme a directrices claras y estrictas, para interrumpir o cancelar los partidos en el caso de cometerse abusos racistas serios.
Además, se solicita que consideren la posibilidad de imponer sanciones deportivas a las asociaciones nacionales y a los clubes cuyos jugadores o afiliados cometan ofensas serias, "incluida la posibilidad de eliminar de las competiciones a quienes persistan en estas actitudes".
El director de comunicación de la UEFA William Galliard aseguró que la resolución "reflexiona positivamente sobre los logros de la campaña antirracismo realizada en los últimos años".
"Creo que la resolución hace justicia a los esfuerzos que la UEFA ha hecho desde hace años", aseguró Galliard. "Esto nos anima a seguir trabajando porque el fenómeno continúa con nosotros".
"Nuestra futura presencia en la campaña antirracismo traerá más de lo mismo", añadió el portavoz de la UEFA. "Habrá tolerancia cero a la conducta racista. continuaremos para examinar la situación en varias regiones de Europa donde existe el problema, y en aquellas que no entienden el mensaje antirracista correrán el riego de ser sancionado".
