MILAN.- El patrón del Inter, Massimo Moratti, y el empresario Marco Tronchetti Provera, se reunirán mañana para discutir la posible venta del club y la depuración del plantel, luego de una pobre temporada deportiva.
Tronchetti es íntimo amigo de Moratti, fanático seguidor de Inter y uno de los empresarios más fuertes de Italia, dueño de la compañía telefónica TIM y de la corporación Pirelli, patrocinador del equipo milanés.
Moratti está pasando las fiestas de Pascuas, que se extendían hasta hoy en Italia, en su residencia de Forte dei Marmi, sobre el mar Tirreno, hasta donde se acercaría Tronchetti.
Continúe o no Moratti al frente del club, la purga del plantel que dirige Roberto Mancini -también a riesgo del despido- es "un hecho consumado", según la prensa local.
Inter quedó eliminado en la Liga de Campeones por el inexperto Villarreal, ya no tiene chances de luchar por el título en la liga italiana y viene de perder el derby ante Milan, que lo marginó al tercer puesto.
Sólo aspira a ganar la Copa Italia (jugará la final con Roma), un premio consuelo en medio de numerosos infortunios.
El club ya tiene decididos los alejamientos de los argentinos Juan Sebastián Verón (volverá a su país por decisión propia) y Cristian "Kily" González, del uruguayo Alvaro Recoba y el brasileño Zé María, a quienes no se les renovarán los contratos.
El veterano yugoslavo Sinisa Mihailovic y el italiano Roberto Favalli tampoco continuarán en el club; mientras el también italiano Cristiano Zanetti ya firmó contrato para Juventus.
A ellos se sumarían el chileno David Pizarro (no conforma su rendimiento y está interesado en sus servicios Roma) y el argentino Santiago Solari, quien sería cedido por una suma modesta a Newcastle de Inglaterra, según la prensa italiana.
El diario francés L'Equipe anunció el arribo a Inter de Sebastien Frey, actual arquero de Fiorentina, y la partida del brasileño Julio César, otro que se sumará al éxodo en el club milanés.
El futuro del delantero brasileño Adriano, destinatario de las principales iras de los seguidores de Inter, también es vacilante, aunque Inter buscaría retenerlo dado su alto valor de mercado.
"Si me siguen demostrando que no me quieren y me lo dicen en la cara, no tendré otro remedio que irme", afirmó Adriano, que la temporada pasada había sido el goleador del equipo y podría ahora emigrar a Real Madrid.
En contraste, los argentinos Javier Zanetti, Walter Samuel, Nicolás Burdisso, Esteban Cambiasso, Julio Cruz (renovó contrato hace pocas semanas), el colombiano Iván Córdoba y el nigeriano Obafemi Martins tienen asegurada su continuidad en la entidad.
El técnico Mancini también podría partir de Inter, con destino a Newcastle, que lo pretende y le ofrece un contrato de tres años, según periódicos ingleses.
La purga no excluye a dirigentes del club, pues siga o no Moratti, tres responsables del área futbolística, todos ex jugadores del club, tiene el futuro a riesgo.
En esa situación están el presidente Giacinto Facchetti y los asesores Gabriele Oriali y Marco Branca, acusados de haber tenido una "conducción desastrosa".