MILÁN/ROMA.- El director técnico de la selección italiana de fútbol, Marcello Lippi, fue hoy interrogado por la justicia, mientras las acciones de Juventus caían a un mínimo récord, en medio de investigaciones por supuestas transferencias fraudulentas y arreglos de partidos.
Las acciones de Juventus bajaron un 11 por ciento, a 1,19 euros (US$ 1,52 dólares), durante esta mañana, mientras Lippi era sometido a las preguntas de la fiscalía. "Me interrogaron como testigo (...) De ahora en adelante, sólo pensaré en dirigir a la selección", dijo Lippi en un comunicado divulgado por la Federación de Fútbol de Italia.
El Primer Ministro Romano Prodi dijo que el escándalo "representa simbólicamente para la gente la profundidad de la crisis moral y cómo ésta se introdujo en todos los sectores de la sociedad".
La última caída en las acciones del club se debió a las noticias del jueves de que el fisco investigaba las oficinas de Juventus, campeón italiano, y los domicilios de dos jugadores.
Durante los últimos 10 días, el precio de las acciones se redujo a la mitad y ahora el valor del club es de aproximadamente 145 millones de euros (185 millones de dólares).
El director ejecutivo de la Juventus, Antonio Giraudo, y el gerente general Luciano Moggi, que renunció a su cargo la semana pasada, son investigados por supuestos fraudes en los acuerdos por transferencias de jugadores. Moggi también está bajo sospecha por arreglo de partidos.
En Roma, Lippi se presentó ante los jueces que están investigando a GEA World por apuestas ilegales. GEA es una agencia que representa a deportistas, y que es manejada por Alessandro Moggi, hijo del ex gerente de Juventus.
Lippi negó esta semana haber recibido presiones por parte de Moggi para convocar a ciertos jugadores para el seleccionado nacional.
Transferencias bajo la lupa
El escándalo sacudió al deporte más popular de Italia y ha desilusionado a los simpatizantes. El jueves las autoridades fiscales registraron las residencias del delantero sueco Zlatan Ibrahimovic y del capitán de la selección, Fabio Cannavaro, en Turín, considerados entre los mejores de Juventus.
La orden de allanamiento alegaba irregularidades en el pago al club holandés Ajax Amsterdam, que en el 2004 acordó transferir a Ibrahimovic por 16 millones de euros.
El director financiero del Ajax, Jeroen Slop, negó cualquier tipo de irregularidad. "Es una ridiculez", dijo Slop a Reuters. "Yo estuve involucrado en la transferencia de Ibrahimovic, así que si hay alguien que sabe del tema, soy yo y repito que es ridículo lo que dicen", agregó.
Juventus enfrenta el posible descenso a la segunda división de la liga italiana si sus directivos son declarados culpables de haber influido en los resultados de los partidos. El club dijo estar cooperando con la investigación.
