MONTECARLO.- La muerte de Edouard Michelin opacó toda la celebración, pero Fernando Alonso no ocultó su enorme satisfacción por haber logrado hoy su primer triunfo en el mítico Gran Premio de Mónaco de Fórmula 1 y haber aventajado aún más a sus rivales en la lucha por el título del Mundial.
"Fue una carrera estupenda. Para mí la primera victoria en Mónaco es muy, muy especial. No tengo palabras, después de ganar en Barcelona ahora ganar en Mónaco, las dos carreras más especiales de todo el año".
Habitualmente comedido cuando habla de festejos, el español reconoció esta vez que tiene mucho que celebrar. "Ahora hay que mirar hacia adelante, pero hay que disfrutar cada momento que estoy viviendo, porque quizá sea irrepetible lo que está pasando".
En cuatro participaciones en Montecarlo, Alonso no había logrado siquiera subirse al podio. Tras su triunfo de hoy, sólo se le resisten otros dos "cajones" del Mundial: Estados Unidos y Canadá. "He puesto una cruz en el calendario a este Gran Premio", aseguró.
Mónaco fue además un gran paso hacia la renovación del título mundial para el español. Ahora suma 64 puntos de 70 posibles, mientras Michael Schumacher (Ferrari), quinto hoy, tiene 43, y Kimi Raikkonen (McLaren-Mercedes) sigue con 27 tras su abandono.
"Cada carrera es más y más importante en la lucha por el Mundial. Kimi no sumó ningun punto, así que estoy diez puntos más por delante, Michael sumó cinco, y eso son cinco puntos más en el campeonato. Paso a paso estamos abriendo hueco y ojalá que en las próximas carreras podamos abrir aún más el hueco".
Pese al acoso al que lo sometió Raikkonen antes de su abandono en la vuelta 50, Alonso aseguró que nunca vio peligrar su primer puesto.
"Salir primero me hizo todo un poco más fácil. Kimi me presionó, pero sabía que en Mónaco es casi imposible adelantar, así que me dediqué a controlar. Mi máxima preocupación era no darme con las barreras y tratar de empujar sin llegar al límite".
El español se quejó del desgaste de los neumáticos traseros de su Renault, que marcaron su estrategia. "Al final del primer tramo de carrera perdimos neumático con ruedas viejas, no tenía mucha tracción. Sabía que el segundo tramo iba a ser muy largo, así que intenté conservar las ruedas para luego empujar. Y luego ayudó la salida del coche de seguridad. Gracias a las características de Mónaco es más fácil controlar la carrera".
Alonso quisó recordar en todo momento a Michelin en sus palabras. "Quiero dedicar el triunfo a Edouard Michelin. Oímos las malas noticias el viernes. El hizo un gran trabajo en los últimos años en Fórmula 1. Gracias a Michelin tuve la posibilidad de salir primero y luchar por el triunfo. Los tres en el podio llevamos Michelin y le dedicamos la victoria".
