
SANTIAGO/PARIS.- El chileno Paul Capdeville (125° de la ATP) confirmó sus progresos tenísticos y el buen momento por el que atraviesa y con un tenis completo, sin puntos bajos, superó al británico Greg Rusedski (42°) en la primera ronda de Roland Garros.
Capdeville, que la semana pasada había superado al estadounidense Robby Ginepri (17°) en el Mundial por Equipos de Düsseldorf, se impuso sobre Rusedski en cuatro sets, con un tanteador de 6-3, 6-1, 4-6 y 7-6(7).
Pese a la fuerza y el potente saque del inglés (60 por ciento de efectividad con su primer servicio y 6 aces), Capdeville hizo lo que mejor sabe: poner la pelota en juego y utilizar su muy buen revés para apurar a su rival.
El chileno no se preocupó cuando Rusedski le quebró el saque en el primer juego del encuentro. Quebró de vuelta y el sexto y así se encaminó a conseguir la primera manga.
La segunda fue casi un trámite. Llegó a estar 4-0 y con un quiebre en el séptimo game redondeó un 6-1 en apenas 23 minutos. El triunfo estaba a un set, pero Rusedski es un tipo experimentado, que pese a no ser un jugador de arcilla, sí había llegado a octavos de final en 1999.
Por eso no extrañó que se quedara con la tercera maga por 6-4 y que emparejara la cuenta del cuarto cuando estaba 1-3. Pero Capdeville se mantuvo sereno y llevó el cuarto set al
tie break. No se amedrentó con el servicio de Rusedski, tampoco con su poca experiencia en los Grand Slam (su única actuación a este nivel fue en el US Open 2005, donde avanzó a segunda ronda). Sacó y cerró la victoria.
Y sus números no son nada de malos: 21 errores no forzados (contra 48 de Rusedski), 49 tiros ganadores (69) y un 50% de efectividad en las ocasiones que se creó para quebrar el servicio de Rusedski (6 de 12).
En segunda ronda, posiblemente el jueves, enfrentará al croata Mario Ancic (12º), que dio cuenta del australiano Nathan Healey (195º) por 6-3, 4-6, 7-6(3) y 6-1. Un desafío mayor, dado el triundo de Ancic sobre Massú la semana pasada en Düsseldorf, pero no imposible.