EMOLTV

Testosterona, la nueva invitada del Tour de Francia

Es segregada por los testículos e influye en diversos órganos, como el cerebro o el corazón, además de tener un efecto anabolizante sobre los músculos. Se prescribe en medicina en casos de insufiencia en los testículos.

27 de Julio de 2006 | 12:48 | AFP
PARIS.- La testosterona, detectada en niveles anormales en un primer análisis al vencedor del Tour de Francia, el estadounidense Floyd Landis, es uno de los productos más frecuentemente detectados en los controles antidopaje.

Prohibida desde 1982, la testosterona es la principal hormona en los hombres, una hormona esteroide del grupo de los andrógenos.

Es segregada por los testículos e influye en diversos órganos, como el cerebro o el corazón, además de tener un efecto anabolizante sobre los músculos. Se prescribe en medicina en casos de insufiencia en los testículos.

Al margen de ese uso terapéutico, como sustancia dopante aumenta la potencia muscular.

Según un estudio reciente realizado en Australia, el dopaje con testosterna puede provocar la disminución de las defensas del cuerpo humano contra ciertas infecciones e incluso a largo plazo contra el cáncer.

Siempre hubo polémica a la hora de determinar el umbral a partir del cual se considera positivo un control por esta sustancia. Si la proporción testosterona/epitestosterona es superior a seis, el deportista es sancionado, a menos que demuestre que es resultado se debe a su condición fisiológica o a una patología.

La técnica de análisis por espectrometría de masa isotópica del carbono permite detectar enseguida si hubo aporte exógeno de testosterona.

En la historia del ciclismo, la testosterona fue protagonista de varios casos de dopaje, sobre todo a finales de la década de los 80, antes de que la eritropoyetina (EPO) se convirtiera en el producto estrella del dopaje.

El holandés Gert-Jan Theunisse, el corredor de larga cabellera que destacó en los Tour de aquellos años (mejor escalador y cuarto en la general en 1989) fue controlado positivo hasta en tres ocasiones por testosterona.

Más recientemente, el italiano Francesco Casagrande y el colombiano Santiago Botero (que presentó en su descargo una receta médica), también "pecaron" con la misma sustancia.

El último caso destacado es el del español Iñigo Landaluze. A pesar de un control positivo, el ciclista no fue suspendido por su federación, lo que le permitió correr el último Tour (fue tercero en la 10ª etapa, en Pau).

La Unión Ciclista Internacional (UCI) recurrió esta decisión ante el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS), que trata ahora la cuestión.

La toma de testosterona al mismo tiempo que otros productos prohibidos es frecuentemente reconocida por deportistas arrepentidos de haberse dopado.
EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?