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Pellegrini se lleva primeras críticas y silbidos

La prensa analiza el pésimo inicio del Villarreal, tachándolo de equipo inofensivo. El DT chileno está preocupado por la sequía en el arco contrario.

11 de Septiembre de 2006 | 08:40 | DPA

Riquelme no pudo cambiar la historia del cuadro castellonense. Foto: EFE
VILLARREAL.- El Villarreal comenzó la temporada con decepciones y parece haber equivocado su rumbo después de quedar fuera de la Copa de la UEFA y ocupar actualmente los últimos puestos de la liga española.

El conjunto amarillo cayó el domingo por 1-0 en su propio campo ante el recién ascendido Recreativo de Huelva y la hinchada sufrió una profunda decepción después de años llenos de éxitos. El chileno Manuel Pellegrini, su técnico, escuchó los primeros silbidos.

"El Recreativo de Huelva sumó su primera victoria en su regreso a primera división frente a un Villarreal que hace sólo unos meses se batía el cobre con el Arsenal por entrar en la final de la Champions. Pero ya no es ese equipo, sobre todo porque sigue mostrándose inofensivo", opina el diario As.

Villarreal quedó fuera de la Copa de la UEFA al ser eliminado de la Copa Intertoto por el modesto Maribor de Eslovenia después de alvanzar las semifinales de la Liga de Campeones en la pasada temporada.

El comienzo en la liga está siendo titubeante y el triunfo del Recreativo tuvo una enorme carga simbólica. Santi Cazorla, un jugador rechazado por Pellegrini al término de la pasada temporada, fue el autor del gol del triunfo andaluz y recibió los aplausos de su antigua afición, que le paso factura a su entrenador.

"Me preocupa mucho estar dos partidos sin marcar. Hay que averiguar qué nos pasa y solucionarlo cuanto antes. Ante el Recreativo hicimos un mal partido. No es fácil saber qué nos está sucediendo, pero hay que trabajar para descubrirlo. Sufrimos impotencia futbolística y ahora sólo nos queda trabajar esta semana y ver cuál es la causa que nos ha llevado a este resultado", analiza Pellegrini.

En Marca se señala que el Villarreal afrontaba el partido con la intención de sumar su primera victoria liguera y la llegada de un recién ascendido al campo de El Madrigal podía hacer pensar que sería un rival accesible para el conjunto de Pellegrini, "pero no fue así a lo largo de los 90 minutos de partido, a pesar de que, en la primera parte, fueron los locales los que llevaron el peso del choque y rondaron con más asiduidad las inmediaciones del área contraria".

Villarreal jugará ante el Deportivo de La Coruña y el Zaragoza sus dos próximos partidos de liga, donde se exige una reacción para espantar el fantasma de la crisis.