INDIAN WELLS.- El suizo Roger Federer y la rusa Maria Sharapova regresan esta semana al desierto de Indian Wells, primer Masters Series de la temporada, donde los dos número uno del mundo defienden sus títulos y donde el Fernando González es la gran esperanza chilena de alcanzar instancias decisivas.
Reciente su segundo título de la sesión en Dubai, Federer se traslada desde el desierto de Dubai al de California, donde ha ganado ya tres veces el título, pero en esta ocasión levantar el trofeo en Indian Wells tendrá un significado especial.
Con 41 victorias consecutivas, la última al vencer al ruso Mijail Youznhy en la final de los Emiratos Arabes, el récord mundial del argentino Guillermo Vilas, de 46, figura ahora en el horizonte de Federer. "Los récords están para ser batidos. Si no lo consigo ahora, será cuestión de volver a empezar", ha señalado para añadir: no juego para batir ese récord, sino para ganar el torneo".
"Desafortunadamente no podemos mirar con diez años de adelanto y decir, esto es lo que quiero hacer en el tenis, tenemos previsiones muy cortas", comentó.
No obstante, si gana su primer partido en Indian Wells (el torneo masculino comienza el viernes), Federer igualaría ya el récord de victorias seguidas del estadounidense John McEnroe (42) y con dos mas empataría con el checo nacionalizado estadounidense Ivan Lendl, con 44. De ganar, sería en el siguiente Masters Series, Cayo Vizcaíno, donde con una sola victoria derrocaría a Vilas.
En Indian Wells, Federer se encontrará con la rivalidad más fuerte del momento, encabezada con el español Rafael Nadal, los estadounidenses Andy Roddick y James Blake, el británico Andy Murray, el argentino David Nalbandian, y el chileno Fernando González, entre otros.
Para Nadal su concurso en el primer Masters Series de la temporada representa una gran oportunidad de resarcirse de un comienzo de temporada no previsto, con su lesión en el glúteo izquierdo durante el Abierto de Australia y la consiguiente recaída durante la confrontación de Copa Davis contra Suiza en Ginebra.
En su reencuentro en el circuito, en Dubai, el jugador de Manacor notó la falta de partidos y torneos para caer en los cuartos de final contra el ruso Mijail Youznhy, finalista contra Federer.
Con el puesto de número uno del mundo en su bolsillo, Maria Sharapova tampoco lo tendrá fácil para defender su título en el torneo que comienza el miércoles.
La belga Justine Henin llega con el sabor de la victoria en Doha, su título 31, obtenido al doblegar a la rusa Svetlana Kuznetsova en la final, y en Indian Wells se unirá a un plantel de jugadoras dispuestas a plantear el máximo de problemas a Sharapova, entre ellas la suiza Martina Hingis, semifinalista en 2006, y las también rusas Elena Dementieva y Nadia Petrova.
Fernando González tomó una sabia decisión luego de su amargo paso por Chile, en el que perdió en cuartos de final del abierto de Viña del Mar y fue derrotado por el ruso Igor Andreev en la Copa Davis de La Serena.
El cansancio que implicó su comienzo de año en Melbourne, donde alcanzó la primera final de Grand Slam de su carrera, lo llevó a borrarse de los abiertos de Buenos Aires y Acapulco, para descansar y preparar de buena manera los dos primeros Masters Series de la temporada.
En Indian Wells, que se juega en el desierto californiano, el chileno nunca ha pasado de cuarta ronda. En 2005 hizo su mejor presentación allí ganándole a Greg Rusedski (a la sazón 44°) y a James Blake (151° del momento). Había quedado libre en primera ronda.
La cuarta vuelta lo emparejó con el local Andy Roddick, quien lo sacó de carrera por un categórico 6-3 y 6-2.
Su quinto puesto en el escalafón mundial, su juego cada vez más sólido en canchas de cemento como la de Melbourne y la experiencia de haber alcanzado la final del abierto de Australia, pueden ayudarle a redondear una presentación histórica. Esta será su sexta presentación como profesional en Indian Wells.
