LONDRES.- El Liverpool, donde milita el chileno Mark González, quiere escribir mañana un nuevo episodio de su rica historia europea, clasificándose por segunda vez en tres años a la final de la Liga de Campeones, para lo que se aferra a la magia de su estadio, Anfield Road, donde debe remontar ante el Chelsea un 1-0.
Los "reds", cinco veces campeones de Europa, ya eliminaron en semifinales a los "blues" en 2005, cuando ganaron el último título en Estambul ante el Milan. La misión no será sencilla, pues el Chelsea logró un 1-0 en la ida gracias al tanto de Joe Cole.
Los campeones ingleses sueñan con la Liga de Campeones después de que su empate 2-2 en la liga local el fin de semana le aleje de un título que ya agarra casi con las dos manos el Manchester United. Además del cansancio, el Chelsea de José Mourinho tendrá bajas claves. También el Liverpool lo fía todo a Europa para alzarse con un título en la presente temporada.
Rafael Benítez, técnico español del Liverpool, cree que la atmósfera de Anfield será un factor clave. "Los aficionados fueron un jugador fundamental hace dos años", dijo. "Los jugadores trabajaron muy duro en la cancha, pero fueron los aficionados los que nos ayudaron a seguir corriendo y corriendo. No sé si eso intimidó al Chelsea, pero sé que ellos sintieron la presión".
"Me gustaría ver mañana al Chelsea bajo presión desde el principio. Estoy seguro de que nuestros fans intentarán presionarlos, aunque con mucho respeto, porque nuestros hinchas son fantásticos, los mejores del mundo", agregó Benítez, que se enfrenta a un nuevo duelo táctico con Mourinho.
De nuevo se pondrá en juego cuál de los dos equipos es mejor. La discusión está abierta, aunque el Liverpool afronta el partido con ventaja respecto a las lesiones. Benítez reservó a muchos jugadores el pasado sábado y recuperará en el lateral derecho a Steven Finnan. Jamie Carragher, Daniel Agger, Peter Crouch, Pepe Reina, Steven Gerrard y Javier Mascherano descansaron en la derrota por 2-1 ante el Portsmouth y serán titulares mañana.
El Chelsea, en cambio, seguirá sin el alemán Michael Ballack, sometido a una operación de tobillo, y tiene muchos problemas en defensa ya que faltará el central portugués Ricardo Carvalho, que se podría perder el resto de temporada tras una lesión de rodilla en el partido del sábado ante el Bolton.
La baja de Carvalho supondrá que Mickael Essien, baja en la ida, ocupe el puesto de central junto al capitán, John Terry, por lo que el gigante Crouch podría sacar ventaja de su estatura en los balones aéreos.
Mourinho espera que la suerte esté del lado "blue" para entrar en la primera final de la Liga de Campeones del conjunto inglés y la segunda para el técnico portugués, que ganó el título en 2004 con el Oporto.
"Cuando perdimos la semifinal hace dos años batimos al Bolton y celebramos el título dos días antes", recordó. "Ahora perdimos dos puntos trascendentales con el Bolton, pero quizás vayamos a Liverpool, ganemos la eliminatoria y pasemos a la final", agregó.
El defensa del Liverpool Carragher aseguró que hay que atacar pero que deben cuidar también la defensa ya que tendrán que enfrentar a Didier Drogba, Andrei Shevchenko y Joe Cole, listos para aprovechar cualquier despiste.
"Es muy importante que consigamos el primer gol porque recibir uno nos lo pondría todo muy difícil, pero estamos bien situados en la eliminatoria", analizó el defensa.
"No tenemos por qué irnos hacia delante desde el principio. Deberíamos aprender de lo que nos pasó con el Benfica el año pasado. Nos dejamos llevar un poco por el entusiasmo en la primera parte y lo terminamos pagando. Tenemos que usar la cabeza", apeló Carragher.