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Santiago: Viernes 26 de abril del 2024 | Actualizado 08:45
CIUDAD DE MEXICO.- Arsenal de Argentina confirmó hoy su fortaleza como visitante en la Copa Sudamericana y venció en esa condición por 3-2 al América de México en la final de ida del torneo, en la que estuvo dos veces abajo en el marcador y que terminó con diez jugadores.
El paraguayo Salvador Cabañas a los 5’ y Alejandro Arguello a los 54’ convirtieron los goles del América, en tanto que Aníbal Matellán a los 31’ y Alejandro Gómez a los 56’ y 65’ dieron vuelta el marcador para Arsenal, que logró un triunfo histórico.
El partido se jugó en el Estadio Azteca de esta ciudad y fue arbitrado por el paraguayo Ricardo Grance, quien a los 78’ expulsó a Carlos Casteglione en el equipo visitante, que será local en la cancha de Racing Club de Buenos Aires el miércoles en la final de vuelta.
América arrancó mejor y lo tradujo rápidamente en gol, cuando el argentino Federico Insúa le puso un pase largo y preciso al corazón del área a Cabañas que el paraguayo definió de cabeza tras ganarle la espalda a Matellán.
La apertura del marcador reflejó lo que pasaba en la cancha, donde el local se floreaba conducido por Insúa, manejaba la pelota y los ritmos ante un Arsenal desconcertado y parecía más cerca del segundo, que la visita del empate.
Así y todo, el equipo argentino se las ingenió para llegar con peligro a los 8’ con un remate de media distancia de Andrés San Martín que el arquero Guillermo Ochoa desvió con esfuerzo por sobre el travesaño.
América respondió a los 17’ con una combinación entre Cabañas e Insúa que se inició con un taco en el área del paraguayo para el volante argentino, quien tras eludir al arquero Mario Cuenca se quedó sin ángulo para el remate y lo estrelló en la parte externa de la red.
Otra combinación entre Insúa y Cabañas derivó dos minutos más tarde en un cabezazo forzado del uruguayo Rodrigo López que conjuró abajo Cuenca.
Arsenal seguía sin hacer pie y apenas arrimó peligro a los 27’ con un cabezazo desviado de San Martín, pero llegó al empate a los 31’, con un tiro libre de Javier Yacuzzi que conectó de cabeza Matellán en el área y dejó sin chances a Ochoa.
La igualdad pareció asentar al visitante, que pasó de dominado a dominador ante un América que sintió el golpe y perdió el rumbo de un partido que tenía servido y comenzó a sufrir.
Pero el equipo mexicano volvió a ponerse arriba a poco de iniciado el segundo tiempo, en una jugada en la que también participó Cabañas, quien le cedió la pelota en el área a Arg?ello para que cruzara un remate al ángulo inatajable.
Parecía complicarse la situación de Arsenal, pero volvió a empatar ni bien sacó del mediocampo, apenas dos minutos después y con un remate de Gómez, quien a los 65’ se calzó el traje de héroe y volvió a decir presente con un cabezazo que superó la salida de Ochoa.
Con América lanzado, Arsenal intentó aprovechar su juego de contragolpe, pero debió retrasar sus líneas cuando Casteglione recibió la tarjeta roja por una falta sin pelota.
El equipo dirigido por el argentino Daniel Brailovsky buscó con insistencia, pero con menos ideas el gol y lo tuvo dos veces sobre el final a través de López, pero Arsenal esperó replegado y aguantó lo que a la postre sería un resultado histórico.
Arsenal, que también había mostrado su efectividad como visitante en este torneo ante Goías de Brasil, Chivas de Guadalajara y los argentinos San Lorenzo y River Plate, quedó así a un paso de un título inédito en medio siglo de historia.
América, que sólo había perdido como local en el Azteca ante Pachuca por 2-0 en octavos de final, deberá intentar torcer el pleito ahora en Buenos Aires, con tres goles en contra que más que doble valen como oro para el equipo argentino.
El equipo mexicano, que ingresó directamente al torneo en octavos de final, dejó en el camino a Pachuca, a Vasco da Gama y a Millonarios de Colombia y deberá remontar una dura cuesta en la revancha para consagrarse como el segundo equipo mexicano campeón de la Sudamericana (Pachuca la ganó el año pasado).
Las otras cuatro ediciones fueron obtenidas por el peruano Cienciano de Cusco (2003) y los argentinos San Lorenzo (2002) y Boca Juniors (2004 y 2005).
