Andrea Koch se prepara ilusionada para el WTA de Viña del Mar

SANTIAGO.- Acaba de finalizar su entrenamiento Andrea Koch (549°), pero accede sin problemas a conversar sobre el próximo torneo WTA de Viña del Mar, que se disputará entre el 11 y 17 de febrero, y la temporada 2008.

Faltan pocos días para iniciar su participación en el primer Tier III que se dispute en el país, al cual accedió gracias a un wild card que también recibió la juvenil Camila Silva, y Koch se encuentra en plena preparación. 

Diego Cornejo y Matías Olivero la ayudan, su sicólogo Enrique Aguayo la acompaña y "entreno con (la argentina) María Irigoyen (298°) y las chicas que van llegando. Me he sentido muy cómoda, tengo un buen equipo y estoy contenta", asegura.

La tenista de 22 años hizo su pretemporada en Villa Alemana, junto a Leonardo Zuleta y otros jugadores como Jorge Aguilar, Guillermo Hormazábal, Ricardo Urzúa y Hans Podlipnik, que actuó en el pasado ATP de Viña del Mar.

El torneo viñamarino asoma en el horizonte y Andrea es optimista: "tengo posibilidades de avanzar, estoy jugando bien y si logro transmitir eso en el debut puedo hacerlo. Después puede pasar cualquier cosa", dice.

Sin embargo, superar la primera ronda no es su prioridad. "Sería interesante, pero más que eso el objetivo es mostrar mi cambio. Como persona y jugando mejor", afirma. "Aunque no gane, la gente va a decir: a lo mejor no ganó, pero se augura un buen año", añade.

Será su debut en un campeonato de la WTA y eso no la deja indiferente. "Es un desafio así que estoy motivada, tengo mucho que ganar", dice ilusionada. Aunque explica que el nivel del torneo será un duro escollo para ella, su motivación no disminuye: "No lo veo como algo tan grande, tengo el nivel para estos torneos, no he estado antes por tonteras mías", reconoce, anunciando lo que se verá en en Club Las Salinas: "Una diferencia en actitud, tenis y físico. Un cambio que a la gente le va a gustar".

No tiene problemas en reconocer que la temporada pasada fue “pésima” para ella. “Estaba entrenando pésimo, no lo hacía casi, por diferentes razones. Pero ya salí de eso, Nano (Zuleta) y mi sicólogo me han ayudado un montón y eso se verá en el 2008”, advierte.

Para este año aspira a entrar en los challengers y quedar entre las primeras 300 o 350 jugadoras del ranking, aunque luego hace un reparo: “Para qué poner metas de ranking. Tengo nivel para estar 200°, pero por diferentes razones no he podido, ahora es diferente”, finaliza optimista.