SAN PERTERSBURGO.- Sin Matías Fernández, quien aún se encuentra lesionado, Villarreal retoma este miércoles la Copa de la UEFA con el partido de ida de los dieciseisavos de final ante el Zenit, en el que, más que el potencial del rival, el equipo español deberá superar el escollo que suponen las bajas temperatura con la que se encontrará.
Además, el equipo del chileno Manuel Pellegrini también considera un hándicap el estado del terreno de juego, que debido al frío estará más duro de lo habitual. Así, según las previsiones meteorológicas, mañana las temperaturas en San Petersburgo serán de entre 1 grado sobre cero y 3 grados bajo cero, además de anunciarse una posible nevada leve.
A pesar de estos inconvenientes, el Villarreal quiere aprovechar el escaso rodaje de su rival debido a que el Zenit acaba de empezar la temporada, para encarrilar la eliminatoria de la competición europea.
Además del volante chileno, el "Submarino Amarillo" afronta la baja del hispano-brasileño Marcos Senna y Ángel López será sometido a una prueba de última hora para observar la evolución de su inflamación de la rodilla derecha.
Tampoco estará disponible el uruguayo Sebastián Eguren, debido a que al haber participado en el torneo con el Hammarby sueco no puede jugar con el Villarreal esta temporada.
Por contra, Pellegrini recuperó al danés Jon Dahl Tomason y Bruno Soriano. Con todo, la única incógnita en la alineación radica en la portería, ya que tras la titularidad de Diego López en los últimos partidos queda la incógnita si Sebastian Viera ocupará el puesto.
En las filas rivales, el mayor problema del Zenit ante este encuentro es su defensa, pues el central belga Lombaerts no podrá jugar por sanción, al tiempo que otro pilar de la zaga, el croata Krizanac, tiene problemas de espalda.
