BEIJING- Los atletas famosos no deberían esperar ningún trato especial en la Villa Olímpica de Beijing, afirmó hoy miércoles el subdirector del lugar, después de que el tenista número uno del mundo, Roger Federer, dijera que no estaba seguro de si se alojaría con los demás atletas.
Federer sostuvo esta semana que aún debía decidir su lugar de alojamiento, después de sufrir dificultades en Atenas 2004, donde su fama atrajo mucha atención por parte de otros deportistas.
"Cada vez que vas a comer la gente te palmea la espalda. No me molesta, pero me gustaría que fuera diferente aunque fuera un sólo día a la semana", dijo Federer.
Yu Debin, subdirector de la Villa, indicó que todos los deportistas estarían alojados en las mismas condiciones. "En la Villa Olímpica, todos los deportistas son iguales. Tenemos la misma (política) para todos", explicó.
El ex campeón olímpico de tenis, Boris Becker, instó el miércoles a Federer a quedarse en la Villa Olímpica, apuntando que a él la experiencia le había ayudado a conseguir el oro en dobles junto a Michael Stich en Barcelona 1992.
También esta semana, el presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol, Ricardo Teixeira, indicó que el equipo olímpico del país, que podría incluir a Kaká, se alojaría en la Villa Olímpica.
Los organizadores de los Juegos ofrecieron hoy miércoles un vistazo previo a las instalaciones, aún en construcción, que alojarán a 16 mil personas entre atletas y personal, durante los Olímpicos y a 7 mil durante los Paralímpicos.
La villa se convertirá en una "comunidad residencial de alto nivel", tras las renovaciones posteriores a los Paralímpicos para "garantizar su legado", indicó Yu.
Además de lugares de oración para "cinco grandes religiones -budismo, cristianismo, hinduismo, Islam y judaísmo-, la Villa ofrecerá espectáculos tradicionales chinos, como tai chi y ejercicios de otras artes marciales para entretenimiento de los atletas, según los organizadores.
