BUENOS AIRES.- Una niña de 12 años quedó herida de gravedad al recibir un disparo desde una camioneta con hinchas del club Godoy Cruz, en otro hecho de violencia vinculado al fútbol argentino, tras el crimen de un seguidor de Vélez Sarsfield el sábado, informó hoy lunes la policía.
La niña permanecía internada en un hospital de Mendoza, tras ser baleada ayer domingo en la puerta de su casa, luego del partido entre Godoy Cruz y Atlético Rafaela, por el campeonato de segunda división.
"La niña recibió un impacto de bala en el rostro y el proyectil quedó alojado en la base del cráneo. Está grave, en terapia intensiva, pero la bala no ha tocado signos neurológicos vitales", dijo el médico Daniel Molina, del Hospital de Niños de Mendoza.
La menor fue alcanzada por un proyectil disparado desde una camioneta que llevaba a hinchas de Godoy Cruz, dijo el abuelo de la víctima, Santiago Azcurra.
El episodio ocurrió en un fin de semana violento, con un hincha de Vélez Sarsfield asesinado de un disparo de arma de fuego en el pecho cuando iba hacia la cancha de San Lorenzo en una caravana de autobuses custodiada por la policía en la capital argentina.
La muerte de Emanuel Álvarez, de 21 años, ensangrentó la sexta fecha del Torneo de Clausura de este fin de semana.
Otra joven murió en Salta (norte), antes de un partido local, al recibir un impacto de bala de un arma disparada accidentalmente por uno de sus amigos cuando se dirigían a un estadio.
El domingo, un enfrentamiento entre facciones rivales de seguidores de Boca Juniors en las inmediaciones de La Bombonera dejó como saldo un herido de arma blanca, un vehículo incendiado y 183 detenidos, de los cuales la mayoría había recuperado su libertad este lunes.
El caso de Álvarez elevó a 180 el balance de víctimas mortales en el fútbol argentino desde 1939, según estadísticas privadas, aunque otros investigadores del fenómeno de la violencia contabilizan más de 250.
