LUQUE.- El Sportivo Luqueño de Paraguay, con un gol conseguido en el tiempo de descuento, logró un agónico empate de 1-1 ante el Sao Paulo de Brasil, que se ubicó como líder del Grupo 7 de la Copa Libertadores de América.
A los 59 minutos, Aloisio, con un impecable golpe de cabeza, abrió el marcador para el Sao Paulo, y a los 91 minutos, el paraguayo Adriano Duarte, con un violento remate de derecha desde la cabecera del área, decretó el 1-1, marcador final del encuentro.
Con este resultado, el Sao Paulo lidera el Grupo 7 con cinco puntos, seguido del Atlético Nacional de Colombia y el Sportivo Luqueño con cuatro y Audax Italiano con tres.
El primer tiempo se disputó principalmente en la media cancha, aunque el equipo brasileño estuvo más cerca del gol. El arquero García del Luqueño jugó un papel muy importante, pues si bien no tuvo tapadas espectaculares, estuvo muy atento para salir de su área chica y neutralizar algunas pelotas que podrían haber sido peligrosas.
El Sao Paulo tuvo una muy buena defensa con los dos zagueros centrales que pudieron alejar las pelotas peligrosas arrimadas por los jugadores del Sportivo Luqueño. El arquero Rogerio Ceni del Sao Paulo no fue exigido a fondo.
En el segundo tiempo, el equipo brasileño fue el dominador de los primeros minutos y consecuencia de ello fue el gol conseguido a los 59 minutos por Aloisio, que aprovechó un centro de Eder y con un perfecto golpe de cabeza colocó la pelota muy lejos de las manos del golero García.
El Luqueño no bajó la bandera. Tenía que justificarse ante su público: unos 15.000 espectadores que llegaron a su estadio, el "Feliciano Cáceres", donde se inauguraba un sector de las graderías.
Además, el equipo jugaba en su cancha por primera en su historia deportiva, pues las veces anteriores jugó en el estadio "Defensores del Chaco", de la Asociación Paraguaya de Fútbol.
Los jugadores intentaron una y otra vez, pero no podían llegar al gol. Ya con el cansancio pusieron garra, temperamento y mucho amor propio y a los 91 minutos Adriano Duarte recibió una pelota en la cabecera del área grande y sacó un violento remate que se clavó en poste izquierdo de Rogerio Ceni.
El empate fue festajado por la hinchada por largos 10 o 15 minutos después de haber finalizado el encuentro.
