BARCELONA.- La escudería japonesa Super Aguri, cuya continuidad en el Campeonato del Mundo de Fórmula Uno corre peligro, tiene previsto celebrar una reunión el próximo miércoles entre sus propietarios y los pilotos con el fabricante Honda para conocer cuál va a ser el futuro inmediato del equipo.
Super Aguri, equipo en el que corren el británico Anthony Davidson y el japonés Takuma Sato, busca apoyo financiero tras fracasar las negociaciones que dos grupos inversores.
La escudería pudo participar el pasado fin de semana en el Gran Premio de España merced al apoyo directo de Honda, la empresa que le suministra los motores.
Sin embargo, ese apoyo económico no va a prolongarse, según ha informado el propio Aguri Suzuki, jefe del equipo.