El subsecretario de Deportes, Jaime Pizarro, anunció en París que Chile quiere seguir con el Dakar.
Sebastián SilvaPARÍS.- Chile y Argentina, que en 2009 acogerán el primer Dakar que no se celebrará en África, quieren mantener el rally en su territorio para el 2010, cuando ambos países celebrarán el bicentenario de su independencia.
Así lo indicaron este martes en París, donde acudieron a la presentación del recorrido del Dakar del año próximo, el secretario de Estado argentino de Turismo, Carlos Enrique Meyer, y su homólogo chileno de Deportes, Jaime Pizarro.
Convencidos del atractivo que la prueba tendrá en ambos países, los responsables argentino y chileno agradecieron a los organizadores haber preferido Sudamérica para organizar el Dakar 2009, después de la suspensión de la edición de este año a causa de la amenaza terrorista en Mauritania.
Meyer y Pizarro coincidieron en destacar la importancia que el Dakar puede tener para sus países, en pleno proceso de expansión turística, y señalaron que es una oportunidad de mostrar sus capacidades de organizar grandes eventos.
"Para nosotros es un bonito desafío", dijo Pizarro, mientras que Meyer lo consideró como "una oportunidad de mostrar dos países muy bastos y con una geografía muy variable".
Ambos responsables ofrecieron su territorio para organizar también el rally de 2010, año en el que celebrarán los 200 años de su independencia.
Pizarro destacó que para Chile el Dakar "será la oportunidad de mostrar un país variado y que será un "evento descentralizado", puesto que mostrará regiones alejadas de la capital.
El subsecretario de Deportes, recalcó el hecho de albergar la jornada de descanso y de poder mostrar al mundo Valparaiso, una ciudad patrimonio de la humanidad.Chile, que podrá a disposición de los organizadores elementos logísticos de seguridad y asistencia sanitaria, destinará al evento unos cuatro millones de dólares.
Argentina y Chile no quieren competir con África para acoger el Dakar y los responsables de ambos países lamentaron los motivos por los que el rally abandonó ese continente.Se mostraron dispuestos a acoger la competición en el futuro de forma alternativa con África.
Tampoco molesta en Argentina y Chile que el rally mantenga el nombre de Dakar, "una marca consolidada y fuerte" que da prestigio a sus países, indicaron.
Para Meyer, el Dakar es un evento que permitirá durante quince días mostrar el país al mundo entero, sin verse obligado a construir grandes infraestructuras, lo que le convierte en un acto interesante desde el punto de vista turístico.
Su Gobierno dedicará al rally más de tres millones de dólares, lo que incluye seguridad, asistencia médica y la organización de las estancias en Buenos Aires, tanto en la salida como en el podium final.