PARÍS.- La rusa Dinara Safina disputará el próximo sábado en Roland Garros su primera final de un Grand Slam, un desafío que afrontará "con calma" pero dispuesta a "morir en la pista".
"Voy a darlo todo, porque si tengo que morir, moriré en la pista. No puedo ahorrar energía, no me hacen falta para nada, lo voy a dar todo", afirmó Safina.
Reconoció que afronta el partido sin presión, porque su rival, la serbia Ana Ivanovic, "tiene mejor clasificación y es ella la que debe probar lo que sabe hacer".
La rusa se considera afortunada de seguir en el torneo tras haber salvado dos bolas de partido en contra en octavos y cuartos de final.
"He estado a punto de quedar eliminada dos veces y sigo aquí. Dios a debido mantenerme en el torneo", aseguró.
Aquellos dos momentos críticos le hicieron cambiar su actitud en la pista. "Decidí no quedarme parada, ser más agresiva, porque no creo que tenga una tercera oportunidad. Cuando pasas una situación como esa ya no piensas más, haces lo que puedes sin mirar alrededor", indicó.