El jugador ya pasó los exámenes médicos en el club español.
El Mercurio
REAL SOCIEDAD.- La derrota que sufrió ayer la Real Sociedad, equipo al que llega en julio, Carlos Villanueva, contra el Alavés puede haber significado el adiós definitivo a sus aspiraciones de ascenso a Primera y ya sólo se aferra a sus opciones matemáticas, después de que en las últimas tres jornadas se haya dejado 9 de los 15 puntos en juego.
La igualdad y la presión del tramo final de la temporada está pasando factura a los tres candidatos que confían en jugar a partir de junio en primera división y los donostiarras no son una excepción porque, tras ganar en Tenerife e ir lanzado en pos de su objetivo, sólo han sacado un punto en las dos citas siguientes.
Ascender en la última jornada sería casi un milagro, a pesar de que el técnico Juanma Lillo se ha apresurado a destacar las opciones reales de triunfo que tiene una plantilla que, sin embargo, no conoce lo que es estar en puestos de ascenso más que en tres ocasiones de las 41 jornadas disputadas.
La "opción B", ascender tras la denuncia presentada en la Federación Española de Fútbol por un agente FIFA por una presunta compra de un partido desde el entorno del Málaga, no la considera casi nadie como algo real y en San Sebastián, salvo contadas excepciones, se ha abordado más desde la anécdota que desde la perspectiva de una hipótesis seria.
El club trabaja ya para que el domingo Anoeta se llene o presente una imagen lo más parecida a ello con entradas muy baratas para los socios, aunque a día de hoy y en plena depresión pos-partido no parece que el aforo vaya a cubrirse en un porcentaje tan alto.Los días siguientes y los mensajes que lancen los jugadores serán determinantes en ese sentido.
