Sólo 69 mil boletos se vendieron para la final, los 16 mil asientos restantes son butacas cautivas.
AgenciasRIO DE JANEIRO.- Las 69.000 entradas disponibles para la final de vuelta de la Copa Libertadores entre Fluminense y Liga de Quito se agotaron hoy, a pocas horas de ser puestas a la venta en Río de Janeiro, lo que dio lugar disturbios.
Miles de hinchas que aguardaban desde la tarde del viernes para comprar su boleto, reaccionaron indignados cuando se informó que no quedaban más, mientras revendedores los ofrecían en las proximidades del estadio Maracaná, a precios mucho más altos.
Según informó radio CBN, hubo enfrentamientos entre los hinchas y el batallón de choque de la policía que, según reporteros que se encontraban en el lugar, los reprimió en forma "desproporcionada". Consultado al respecto, el mayor Busnelo, del Grupo Especial de la Policía en Estadios y responsable del operativo, no quiso efectuar declaraciones.
Fluminense, uno de los clubes más populares de Brasil, disputará su primera final de la Copa Libertadores. Por haber sido el equipo mejor clasificado de la fase inicial jugará el partido de ida en Quito el 25 de junio y la revancha el 2 de julio en el Maracaná.
Los ingresos comenzaron a ser vendidos a las 8 locales (11 GMT) en el Maracaná y otros cuatro puntos de Río de Janeiro, y a las 11 (14 GMT) el superintendente de Fluminense, Carlos Henrique Correia, anunció que sólo quedaban 3.000. Poco antes de las 16 (19 GMT) ya no quedaban entradas en venta. "Lamentablemente el Maracaná tiene capacidad para 85.000 hinchas, pero nosotros sólo podemos vender 69.000. El resto son butacas cautivas, que no se venden" declaró Correia.