El australiano Greg Norman, a sus 53 años, aún sigue haciendo historia en el golf.
Agencia
MADRID.- El australiano Greg Norman, que a sus 53 años admite que juega más al tenis que al golf, se ubicó sorprendentemente en el segundo puesto en el Abierto Británico que se disputa en el Royal Birkdale, en la costa oeste de Inglaterra.
El veterano jugador, que quedó a un golpe del nuevo líder, el coreano KJ Choi, demostró que en el deporte de elite no hay milagros y que el golf es de los pocos que deja una porción de gloria a los más experimentados.
Norman fue durante 331 semanas número uno del mundo -sólo superado por Tiger-, que ganó 84 títulos en 13 países; que conquistó por dos veces el Open Británico: Royal St.Georges, en 1993, y Turberry, en 1986.
Ese mismo año jugó el partido final de los cuatro "Grandes" y que en estos magnos torneos fue hasta ocho veces segundo y perdió cuatro desempates.
El australiano pasó a sénior al cumplir 50 años no sin lesiones en la espalda y rodilla; que hace muchos años que dejó de ser golfista a tiempo completo y apenas entrena.
