Ortega sigue siendo un dolor de cabeza para River.
Agencias
BUENOS AIRES.- La dirigencia de River Plate perdió la paciencia con el capitán Ariel Ortega luego de otra recaída en su adicción al alcohol y podría separarlo del plantel para que se interne en una clínica.
"Con Ortega hemos tenido algunas licencias que a lo mejor con otras personas no se tienen. Lamentablemente por su adicción no ha sabido responder", aseguró hoy sábado el vicepresidente de la entidad, Domingo Díaz, en declaraciones a radio Latina.
Ortega, de 34 años e ídolo total entre los fanáticos de River, libra desde hace tiempo una batalla por su adicción al alcohol. Debido a eso, fue protagonista de diversos episodios que dieron que hablar fuera de las canchas.
El último incidente fue el viernes cuando tras salir de una discoteca en horas de la madrugada, al parecer en estado de ebriedad, chocó con su camioneta contra un surtidor de combustible de una estación de servicio.
Según la prensa deportiva local, el técnico Diego Simeone le habría solicitado a la dirigencia separar al "Burrito" del plantel.
Díaz dijo que aún no se había tomado una decisión debido a que el presidente José María Aguilar se encuentra en Panamá en un Congreso de la Conmebol, pero adelantó que "tenemos que respaldar la decisión que tomen ellos (cuerpo técnico)".
La directiva había protegido al ídolo pese a sus recaídas, pero ahora no parece dispuesta a tolerar nuevos incidentes.
"Ortega haciendo las cosas que hace está deteriorando un poco la imagen de todo el plantel y del cuerpo técnico", apuntó Díaz.
El directivo cree que Ortega debería internarse en una clínica para combatir su adicción, algo a lo que se ha negado el jugador, y mientras tanto "le respetaremos el contrato hasta que se cure".
Ortega renovó hace unos días contrato por otros dos años. Y aunque sea separado del plantel, Díaz aseguró que el club no abandonará al jugador: "Estamos dispuestos a hacer lo necesario junto a la familia para que Ortega no cometa más estos actos y se cure definitivamente", concluyó.