PARIS.- El presidente de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), Max Mosley, propuso hoy miércoles la introducción de un "motor único" para todos los equipos como parte de su batalla para reducir los costos de la Fórmula 1.
"Comprendo que cada constructor querrá imponer el suyo, pero en lo que yo llamo 'el mundo real' si cada escudería pudiese comprar propulsores menos caros, creo que con toda seguridad lo haría", afirmó Mosley a L'Equipe.
Mosley sostuvo que un paso en esa dirección sería muy útil para la aplicación de la tecnología de la F-1 a los autos de calle.
También exhortó a las distintas escuderías que participan del certamen a "dar pasos efectivos para bajar los costos y salvar a la categoría", algunos de los cuales serían trabajar para adoptar suspensiones, gomas y cajas de cambio únicas.
Mosley viene sosteniendo que las inversiones de los equipos son "exageradas" y, tarde o temprano, provocarán serios problemas: "El único camino es el de la austeridad y hay pasos concretos que se pueden dar en ese sentido", concluyó.
Mosley, quien se retirará cuando concluya su mandato, a fines de 2009, tras el escándalo de vida privada que casi lo obliga a dejar el cargo, se comprometió a poner todo su esfuerzo para bajar los costos de la F-1.