Maradona quiere "cerrar un año redondo conociendo a Obama"

BUENOS AIRES.- Lo único que le falta es conocer a Barack Obama: feliz, sereno, articulado y reflexivo, el Diego Maradona "modelo 2008" cierra su "año milagro" con el deseo de poder conversar mano a mano con el presidente electo de los Estados Unidos.

"¡Viva Obama!", dijo Maradona en la noche del domingo durante una extensa entrevista televisiva con el periodista Luis Majul. "Me encantaría conocerlo. Cada vez que lo veía en las primarias decía '¡Vamos Obama, vamos Obama!'".

¿Sueña con que Obama lo llame por teléfono? "No creo...", respondió el nuevo seleccionador nacional argentino. "¡Eso sí sería cerrar un año redondo!".

Más que por el relativo desconocimiento del fútbol que tiene Obama amante del baloncesto y el béisbol, el contacto con Maradona probablemente se demore por otra razón: la Justicia le tiene prohibida la entrada al argentino a territorio estadounidense.

El positivo por pseudoefedrina en el Mundial de Estados Unidos 94 es la razón. El campeón mundial de México 86 se tomó con tranquilidad ese recuerdo, y aseguró rápido de reflejos que será Carlos Bilardo quien dirija al equipo si alguna vez la selección argentina debe jugar en Estados Unidos.

Eso sí, no pudo evitar una ironía: "Yo dije algo el otro día que le puede servir a Obama. Él tiene como gobernador en California a (Arnold) Schwarzenegger. Si a mí me logran convencer de que no tomó anabólicos siendo culturista, yo me hago cura".

Tras confesar su asombro por la atracción que generó en su reciente visita a la India, Maradona, aparentemente recuperado de su adicción a las drogas, aseguró haberse "reinventado" como "padre, como persona, como hombre que quiere la vida y se levanta temprano todas las mañanas".

Orgulloso por haber recibido el premio al mejor jugador de todos los tiempos en el Calcio -"arriba de muchos grandes que jugaron en el fútbol italiano"-, Maradona prometió que no favorecerá a Sergio "Kun" Agüero pareja de su hija Gianinna, a la hora de tomar decisiones en la Selección.

Si el "Kun" juega mal, perderá el puesto. "Lo voy a poner a (Carlos) Tevez. Se lo dije al 'Kun': 'Si vos no la seguís rompiendo, yo no te puedo llamar. Pero no sólo con él. Lo mismo voy a hacer con (Lionel) Messi, (Fernando) Gago, Román (Riquelme), (Gabriel) Heinze En la selección mía van a estar los mejores", aseguró.

A sus 48 años Maradona siente su sorpresiva llegada al comando de la selección como "lo máximo".

Javier Mascherano es el "fiel representante" del tipo de jugador que quiere el ex hombre de Boca, Barcelona y Napoli, aunque con límites aún: "Lo que quizás tenía la Selección del 86 y no tiene ésta es que el capitán de la selección, que era yo, reunía a todos los jugadores y discutía qué nos faltaba".

Buen "vendedor" de sus virtudes, Maradona aseguró manejarse con total independencia en su nuevo cargo: "No soy amigo de representantes, empresarios ni managers... No tengo ningún compromiso, el único compromiso es la camiseta", lanzó.

Y la decisión de quiénes vestirán esa camiseta es suya, sólo suya. Lo explicó en su ya clásica utilización de la tercera persona para referirse a sí mismo. "Acá el único que habla es Diego, acá el único que decide es Diego. Nos podemos reunir (con otros integrantes del cuerpo técnico), pero la última palabra es de él (Maradona)", dijo.

Con el todopoderoso Julio Grondona, presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), ya está todo arreglado, aseguró."Él es el que te baja la línea. Los dos queremos lo mejor para esta camiseta. Cerramos el cajón de la pelea, le pusimos llave y dijimos: 'De acá, para adelante'".

Ni siquiera a su gran amigo Hugo Chávez, presidente de Venezuela, perdonará Maradona en su intento de hacer olvidar el pasado reciente con una gran actuación al frente de la selección.

Con Chávez "todo bien", dijo el zurdo pensando ya en el choque con Venezuela por las eliminatorias de cara al Mundial de Sudáfrica 2010 a principios del año próximo. "Pero los tres puntos tienen que quedar acá", finalizó.