El Mercurio
LIMA.- El presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), Manuel Burga, viajó la noche de este lunes con rumbo a Paraguay, poco después de que un fiscal le pidiera a la Justicia que ordene su captura por supuestamente apropiarse de 300 mil dólares que le corresponden por ley a un fondo prodeporte escolar.
La versión online del diario limeño "El Comercio" informó que Burga salió sin problema alguno, pues no hay aún ninguna orden en su contra. Se cree que el viaje a Asunción, donde está la sede de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), podría haber estado planeado desde antes de conocerse la petición del fiscal Jorge Sanz.
El caso, en investigación desde enero, se origina en que Burga se niega supuestamente a entregar los 300.000 dólares, monto que según la ley debe dar como porcentaje de lo que cobró la FPF por venderle a los canales peruanos América y ATV los derechos de transmisión de los partidos del seleccionado peruano en la eliminatoria hacia el Mundial de Sudáfrica 2010.
Al exigir que se dicte la orden de salida o al menos un impedimento de salida del país, Sanz denunció que el juzgado encargado actúa con parsimonia en el caso, por lo que no descartó acusarlo ante la Oficina de Control de la Magistratura.
"Pasaron tres meses y no se dicta el auto apertorio de instrucción, pese a que la Fiscalía ha cumplido con todos los requerimientos establecidos", se quejó el fiscal, que plantea además que al dirigente se le pidan 10.000 soles (unos 3.200 dólares) como garantía para el pago de una eventual reparación civil.
Sanz también investiga a Burga por el presunto manejo irregular de la escuela de técnicos Alfonso Huapaya, propiedad de la FPF. La Fiscalía halló que los títulos entregados por esa academia podrían no tener valor legal, por no haber sido firmados por su director, Enrique Pacheco, sino por su hijo homómino, lo que podría constituir delito de estafa.
Burga, un abogado de 51 años que cuenta con respaldo irrestricto de la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) y la Conmebol, asegura que los cargos en su contra hacen parte de una estrategia de sectores del gobierno para sacarlo del cargo.
Las supuestas "injerencias gubernamentales" ya motivaron que la FIFA suspendiera al Perú durante varias semanas el año pasado. La suspensión fue levantada luego mientras se negociaba un acuerdo y en el momento todo está en "stand by".
Según encuestas, Burga es rechazado por alrededor de un 90 por ciento de sus compatriotas. El presidente de la FPF también tiene en su contra a la casi totalidad de la prensa, que lo responsabiliza de haber llevado al fútbol peruano al último puesto en Sudamérica con su incapacidad y sus supuestos "manejos mafiosos".
