Lula le traspasó su fanatismo por el fútbol a Obama.
AFPLAQUILA (Italia).- El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, regaló este jueves a su par de Estados Unidos, Barack Obama, una camiseta de la selección brasileña de fútbol al comenzar una reunión bilateral al margen de la cumbre del G8 en L'Aquila.
Obama sonrió al recibir la camiseta, con los autógrafos de los jugadores brasileños y el número 5 en la espalda.
"Mirad esto, precioso. Maravilloso. Me encanta", dijo Obama mientras mostraba la camiseta a los fotógrafos al comenzar la reunión.
Ninguno de los dos presidentes hizo más declaraciones a la prensa al comenzar la reunión bilateral, acordada la pasada noche.
Originalmente, el presidente norteamericano había planeado reunirse con el líder chino, Hu Jintao, pero éste regresó el miércoles a primera hora a su país ante las manifestaciones de la minoría uigur en la provincia de Xinjiang, reprimidas con violencia y en las que han muerto ya más de 156 personas, según las autoridades en Pekín.
Obama y Lula, que ya se vieron en Washington el pasado marzo cuando el presidente brasileño fue el primer líder latinoamericano en visitar la Casa Blanca desde la investidura del nuevo presidente norteamericano, se saludaron con un efusivo apretón de ambas manos.
El mandatario brasileño también había regalado camisetas de la selección de su país a los líderes del G5 (México, Brasil, China, India y Sudáfrica) reunidos el miércoles en el primer día de sesiones de la cumbre del G8.