PORT SAID (Egipto).- Brasil, que se mide ante Australia en el Mundial de Fútbol Sub 20 de Egipto, el sábado en Port Said, en la última jornada del grupo E, tratará de mejorar la imagen que dio en el empate sin goles contra la República Checa, y terminar primero de la llave.
A la selección auriverde, que lidera el grupo con cuatro puntos, los mismos que República Checa, le interesa vencer a Australia, para terminar líder, seguir en Port Said y no tener que moverse de ciudad.
Una victoria le aseguraría el primer puesto, pero un empate permitiría a República Checa o Costa Rica, que se miden en el otro partido, y que tienen cuatro y tres puntos, respectivamente, hacerse con la primera plaza, con lo que Brasil terminaría segundo y tendría que jugar en Alejandría los octavos frente al primero del F (Emiratos Árabes, Honduras o Hungría).
El campeón sudamericano se enfrenta al último clasificado del grupo, Australia, que perdió sus dos primeros partidos, contra los checos (2-1) y los costarricenses (3-0), con el papel de favorito y con la idea de mantener su portería a cero.
Frente a Costa Rica, en el primer partido, que la 'Seleçao' ganó por 5-0, Brasil ofreció un recital, pero ante la República Checa, el equipo se vio incapaz de superar el sistema defensivo férreo que había establecido el equipo europeo. "Pienso que mejoramos en relación al primer partido porque corregimos nuestro posicionamiento defensivo.
La República Checa no tuvo ocasiones de gol, al contrario que Costa Rica. Quedé muy satisfecho con la actuación de los jugadores", señaló el técnico brasileño, Rogerio Lourenço, pese al empate sin goles.Brasil querrá encontrar un equilibrio entre la buena actuación ofensiva contra Costa Rica, y la defensiva frente a la República Checa.
"El partido contra los checos sirvió de lección para los jugadores y para mí. Vamos a tener que trabajar para buscar soluciones antes rivales parecidos, que se meten atrás y sólo Brasil ataca, ya que tendremos más equipos así en contra. Lo importante es el equilibrio", añadió Lourenço.
El seleccionador holandés de los australianos, Jens Versleijen, casi da por perdido el partido antes de jugarlo, y afirma que se conformaría con un empate ante Brasil para no quedar eliminados sin lograr ningún punto."Siempre hay que ser positivos, pero también realistas.
Debemos restablecernos, hacer acopio de fuerzas para plantar cara a Brasil y conseguir el mejor resultado posible. No queremos volver a Australia sin ningún punto", afirmó Versleijen.Lourenço no se fía de su rival, y afirma que sus hombres saldrán con la máxima concentración posible.
"Tengo buenas sensaciones respecto a nuestras opciones, aunque también soy consciente de que todos los equipos de este torneo tienen sus cualidades, y de que estamos en una liguilla muy reñida", afirmó.
El seleccionador brasileño dará una oportunidad probablemente a varios de los suplentes y el portero Saulo, el futbolista más alto del torneo (1,98 metros), podría debutar.