SANTIAGO.- Utilizando la ironía como recurso, el presidente de la Asociación de Fútbol Profesional, Harold Mayne-Nicholls, criticó duramente el actuar del síndico de quiebras de Rangers de Talca, Cristián Herrera, quien anunció anoche que desistirá del recurso presentado ante la justicia ordinaria y que derivó, incluso, en un ultimátum de la FIFA sobre una posible desafiliación del balompié criollo, poniendo en riesgo la no presencia de la selección en el Mundial de Sudáfrica 2010.
"¿Lo tiene molesto la situación? No, me tiene muy contento", respondió a su llegada el mandamás nacional al aeropuerto de Santiago, donde catalogó lo ocurrido como bochornoso.
"Hemos pasado una vergüenza que no tiene nombre, el país ha pasado una vergüenza que no tiene nombre (...) Vergüenzas de este tipo nosotros no las podemos dejar pasar, y ningún chileno tampoco (...) Hoy estamos en el mapa del mundo, una vez más, por un hecho absolutamente fuera de lo deportivo, después de haber luchado tanto por dedicarnos tanto a ello. Lo único que hacen es ensuciar la imagen en el mundo", reclamó Mayne-Nicholls.
La máxima autoridad de la ANFP dijo desconocer si la acción del síndico Cristián Herrera responde a una postura personal, aunque puntualizó que "le advertimos en todos los tonos" los riesgos que se corrían con el reclamo ante una instancia ajena al fútbol.
"Lo que sí ha velado (es) por hacerle daño al país y eso lo ha logrado con creces (...) le debe una explicación al país, (ya que) él sabía a lo que se exponía y lo hizo absolutamente ex profeso", concluyó.
En el próximo Consejo Extraordinario de Presidentes, a realizarse el lunes, determinará si Rangers es desafiliado de la ANFP o sólo baja a la Primera B, tras haber presentado seis extranjeros en su último partido por el torneo de Clausura.