SANTIAGO.- Primera etapa en la que Francisco López no llega averiado a la meta. Y más allá de conseguir su mejor resultado del Dakar 2010, el curicano botó la tensión de los anteriores días donde sufrió por la falta de gasolina.
Este martes no tuvo problemas y llegó a la meta en la cuarta posición en Copiapó, primera ciudad chilena que recibe la prueba.
Pero la gran felicidad de López era por llegar con estanque lleno.
"Estoy feliz. Se solucionó el tema de la gasolina. Los estanques estaban llenos, fue como ganar la carrera", dijo el nacional.
Todo esto ayudado de que "el motor va perfecto. Ya me siento mucho más cómodo".
Con respecto a la etapa, dijo que le sorprendió el nivel de Casteu. "La etapa era para motos grandes, pero él (Casteu) anduvo muy rápido, no oude alcanzarlo".
¿Y la próxima jornada? "Mañana empiezan las etapas de verdad, las más fuertes. Habrá más errores de navegación, por eso hay que ir tranquilo".