BUENOS AIRES.- El fanático de 14 años de edad de Newell's Old Boys que recibió tres balazos en la cabeza el jueves por la madrugada falleció hoy, muerte que si bien era previsible había sido erróneamente anunciada en la víspera.
El deceso de Wálter Cáceres fue confirmado por el secretario de Salud Pública de la provincia de Santa Fe, Lelio Magiaterra, a la agencia local DyN, que recordó que la justicia inició una causa por "homicidio".
La muerte de Cáceres había sido erróneamente comunicada el jueves por la noche por la policía y luego desmentida por los médicos del Hospital de emergencias Clemente Alvarez, al que el adolescente había sido trasladado tras el ataque del que fue víctima.
Cáceres había ingresado a ese centro asistencial con tres balazos en la cabeza y otro en la espalda tras un ataque al autobús en el que viajaba junto a otros fanáticos de Newell's Old Oys, dos de los cuales también resultaron heridos.Uno de ellos, de 28 años, recibió un disparo en el cuerpo y el otro, de 42, en la cara.
Ambos permanecían internados, pero sin riesgo de vida.El ataque se registró el jueves por la madrugada al regreso de los aficionados "leprosos" a la ciudad de Rosario desde Buenos Aires, donde Newell's perdió 2-1 en su visita a Huracán por la segunda fecha del Torneo Clausura.
Según una línea de investigación, el ataque podría estar relacionado con una disputa interna en la barra brava de Newell's Old Boys, donde perdió poder la facción que respondía al anterior presidente del club, Eduardo López.
"Esto es una locura que va más allá de cuestiones políticas. Murió un pibe de 14 años y hay una familia destrozada, pero pudo ser una tragedia aún peor", comentó el hoy vicepresidente de Newell's, Claudio Martínez.
"Esto da ganas de abandonar todo e irse. El fútbol está como está por los dirigentes delincuentes y las barras bravas", agregó Martínez.
El triunfo de la lista encabezada por Guillermo Lorente, actual presidente de Newell's, en las elecciones internas del club puso fin a un extenso y nefasto mandato de López, contra el cual la nueva dirigencia inició una causa penal que, denuncian, "está inactiva desde hace un año".
La disputa por el poder en la barra brava del club rosarino no ceja y pudo haber derivado en el ataque al autobús, alrededor del cual se encontraron gran cantidad de casquillos de bala por lo que la policía presume pudo haber habido disparos también desde el vehículo.
Con el fallecimiento del joven simpatizante de Newell's Old Boys, la lista de muertos por hechos de violencia en el fútbol argentino asciende a 244 personas.
La última víctima de la violencia relacionada con este deporte era también un fanático de Newell's: Pablo Gómez, ex integrante de la antigua barra brava del club y asesinado a balazos en plena calle en octubre