Garcés cree que para la UC es relevante no dejar escapar ningún punto como local.
David Velásquez, El Mercurio
SANTIAGO.- Para Universidad Católica el partido de este martes ante Universidad de Chile suena clave y no sólo por los puntos. También por el estado anímico de los jugadores después del irregular comienzo de temporada.
Y al interior del cuadro cruzado reconocen que el receso por el terremoto que azotó a Chile les sirvió para ajustar piezas.
"Nos sirvió para ajustar los errores que cometimos y por los que perdimos puntos importantes. Tenemos que mirar para adelante, mejorar el rendimiento para volver a la victoria", dice el argentino Damián Díaz.
En tanto el portero Paulo Garcés le entregó el favoritismo a la escuadra azul, debido a que los laicos están acostumbrados a jugar en el Sánchez Rumoroso, estadio que acogerá el duelo este martes.
"La U tiene un poco de ventaja porque ha jugado aquí y creo que ha ganado todos los partidos", dice el arquero de los de la franja.
El mismo Garcés admite que para ellos "no es fácil volver a jugar, estamos todos pensando en el terremoto y todo lo que nos tocó vivir, pero somos profesionales y éste es nuestro trabajo".
El duelo se juega este martes a las 21:15 horas en Coquimbo.