BAHREIN.- Ocho meses atrás un resorte impactaba a gran velocidad en su casco, dejándole al borde de la muerte: tras el milagro, el brasileño Felipe Massa celebró hoy por adelantado su regreso a la Fórmula 1 el domingo en el Gran Premio de Bahrein.
"Estoy de vuelta después de ocho meses. Estoy realmente feliz y motivado", dijo hoy Massa, a 24 horas de que la temporada 2010 de la categoría dé comienzo en el circuito de Sakhir con las habituales prácticas libres de los viernes.
Todavía están frescas las imágenes del brasileño noqueado en el habitáculo de su Ferrari en las pruebas de clasificación del último Gran Premio de Hungría, donde una pieza metálica desprendida del Brawn GP de su amigo y compatriota Rubens Barrichello le impactó de lleno en el casco a cerca de 200 kilómetros por hora.
El sudamericano debió pasar por el quirófano para curar las fracturas de cráneo sufridas y estuvo en coma inducido durante algunos días. Pero ese momento se conjuga en pasado y sólo una cicatriz por debajo del ojo izquierdo recuerda lo ocurrido.
El británico Jenson Button, campeón del mundo en 2009, resumió el sentir de la parrilla: "Es grandioso tener de vuelta a Felipe".
Carismático dentro de su equipo, Massa volvió a conducir primero un karting y luego un viejo Fórmula 1 a finales del año pasado como parte de su preparación para estar listo esta temporada, en la que deberá luchar por el título con, entre otros, su nuevo compañero de equipo, el español Fernando Alonso.
"Pienso que las cosas entre nosotros irán bien", señaló el brasileño, que compartió Ferrari con un mito como el alemán Michael Schumacher en 2006 y también con el finlandés Kimi Raikkonen entre 2007 y 2009.
"Tuve compañeros de equipo fuertes los años anteriores, así que las cosas realmente no cambiaron para mí".
No sería de la misma opinión el eterno Enzo Ferrari, fundador de la "Scuderia", fallecido en 1988. "Il commendatore", como se conocía a uno de los personajes más famosos de la Fórmula 1, creía que un piloto se volvía algo más lento cuando se convertía en padre. Massa tuvo su primer hijo el pasado noviembre.
"No puedo coincidir, disfruto de ser padre. Es un sentimiento increíble. Es más que una motivación en mi vida y me hace trabajar todavía más duro", señaló el subcampeón de 2008 recientemente en la página web de Ferrari.
Para ganar unas décimas pese a su paternidad, Massa tendrá un buen ejemplo en un mentor que esta temporada se vestirá de plateado para hacerle más difícil todavía la lucha por el título, Michael Schumacher. El alemán ganó cinco de sus siete campeonatos del mundo ya sabiendo lo que es cambiar pañales.
