Hace rato que Felipe Seymour viene siendo clave en el trajín del mediocampo de la U.
Andrea Robles, El Mercurio
SANTIAGO.- Invictos y punteros de su grupo en la copa Libertadores. Además, de ganar su partido pendiente ante O'Higgins en el torneo local serán líderes también del campeonato chileno.
Gran comienzo de semestre para la Universidad de Chile de Gerardo Pelusso. Los azules, a pesar de no deslumbrar con su juego, se han mantenido sólidos y mandan en los certámenes en que están participando.
Pero, ¿Cuáles son las claves para este momentáneo éxito?
Todo parte por el buen trabajo defensivo. Este miércoles ante Flamengo, incluso en el gol que recibieron, la jugada parte de una posición adelantada.
Y este buen trabajo en la última línea parte por un verdadero "patrón" como es Mauricio Victorino. El charrúa manda desde atrás e incluso hace que el a veces errático Rafael Olarra cumpla y se ordene más de lo acostumbrado. Entre los dos, por ejemplo, fueron capaces de frenar bien a Adriano y Vagner Love. Matías Rodríguez, el otro uruguayo, pasa casi desapercibido, pero cumple.
Por el costado, a pesar que muchas veces pasa no se nota mucho su trabajo, la labor de José Contreras es clave en el ida y vuelta. El ex Huachipato marca y entrega bien el balón hacia adelante. Cuado puede se descuelga, aunque con Pelusso es más cauteloso.
Quizás uno de los puntos más fuertes en el esquema universitario está en la contención. Ahí aparece la figura de Felipe Seymour, quien ya en la era Markarián aparecía como inamovible. Hoy se nota cuando no está. Jugador solidario, que pisa ambas áreas y le da temple al mediocampo. Y a pesar de que se lesionó ante los brasileños, Marco Estrada de a poco retoma su nivel y de sus pies nacen varios avances azules. Sus cambios de juego marcan sorpresa.
De ahí aparece Montillo y Olivera. Dos con oficio, que le dan categoría a la U de mitad hacia arriba. El argentino marca los tiempos y aunque a veces se pierde, se nota su trajín y el ritmo que impone en el medio. El delantero uruguayo es un dolor de cabeza presencial para los defensas rivales. Casi todos los balones lo buscan a él y es difícil aguantarlo. Es el goleador del torneo local y a pesar de que no marcó ante Flamengo su presencia intimida.
Pero todo esto no sería posible sin el orden táctico que le ha dado Pelusso a esta Universidad de Chile. Como buen uruguayo todo parte con defender bien. Después, hacia arriba, con un buen trabajo táctico y aprovechando bien los balones detenidos marcan diferencias.
Aunque aún no han ganado nada, por lo menos el incio ha sido bueno y se perfilan como el chileno más próximo a pasar a la segunda ronda de la copa Libertadores. Algo no menor para estos tiempos.
