Australia ya lo sufrió: Rodríguez expulsó a Cahill tras un foul que no era para más que amarilla.
AFPSANTIAGO.- No tendría por qué influir en el partido. Ese es el ideal de un buen arbitraje: pasar lo más desapercibido posible y dejar que los protagonistas del partido sean los jugadores, en este caso chilenos y españoles.
Pero al parecer no habrá mucho de eso en el duelo que comenzará desde las 14:30 horas en Pretoria. Y es que el juez mexicano Marco Rodríguez, profesor de educación física de 36 años, es un "pistolero". De esos que no se demoran mucho en meterse la mano al bolsillo y llenar la cancha de amonestados.
"Es un árbitro que se pega estrictamente al reglamento, incluso es muy rigorista. Es de los jueces más polémicos en México, porque no aplica mucho el criterio. Por eso mismo en sus partidos siempre hay muchas tarjetas rojas y amarillas", advierte Iliana Salgado, periodista deportiva mexicana del diario Milenio.
Y hay que recordar que la "Roja" ya ha sufrido esa rigurosidad. En la Copa América de Perú 2004, Chile empataba con Brasil 0-0 y "Chiquidrácula" (como lo apodan en su país por su parecido con un personaje de una serie infantil) cobró un penal a favor de Chile. Sebastián "Chamagol" González tomó la responsabilidad y anotó, pero el mexicano hizo repetir por una supuesta invasión en al área. Tras cartón, el delantero falló y Luis Fabiano convirtió sobre el final del partido.
Aunque no todo es negativo en Rodríguez, que es un acérrimo lector de la Biblia. Su rigurosidad y apego al reglamento le hace ser totalmente parcial con los equipos. Que en un duelo ante una potencia como España no deja de ser importante.
Así lo aclara Salgado: "Se distingue por no flaquear ante figuras. No le importa si es Xavi o Villa el que está al frente, no se deja amedrentar. Le importa muy poco si esta jugando ante grandes estrella".