PUERTO ELIZABETH.- El portero de la selección brasileña, Julio César, admitió hoy que nadie esperaba la derrota ante Holanda en los cuartos de final del Mundial.
"Nadie lo esperaba. El grupo tenía mucha confianza y estaba bastante unido después del trabajo de tres años y medio", dijo a la televisión con lágrimas en los ojos inmediatamente después del pitido que ponía fin al sueño de conquistar el sexto título de la historia de Brasil.
"Pero el fútbol tiene estas cosas. Creo que tenemos que saber salir de ésta. El mundo no se acaba. La confianza del seguidor brasileño era muy grande", añadió entre sollozos e intentando contener las lágrimas.
El portero dijo que, en su opinión, el juego de Holanda fue mejor después del golpe del primer gol de Felipe Melo en propia puerta en el que Julio César participó. "Son cosas que pasan en el fútbol", dijo.
"Pero nadie lo esperaba. Brasil en cualquier competición que entra, lo hace para ganar", añadió. Hablando en nombre del grupo, agregó antes de retirarse cabizbajo a los vestuarios: "Es un sentimiento muy triste".
Van Bommel fue sincero: "El 1-1 fue suerte"
El holandés Mark van Bommel se mostró hoy contento por la victoria de su equipo frente a Brasil en los cuartos de final del Mundial de Sudáfrica, pero se mostró a la vez extrañado por la mala actuación de los sudamericanos en el segundo tiempo.
"El otro equipo salió de repente de otra manera al campo", dijo Van Bommel tras el pase a semifinales en Port Elizabeth, donde los "oranje" ganaron por 2-1 tras remontar un 1-0 en contra. "En el primer tiempo fuimos un paso por detrás" de Brasil, reconoció el volante del Bayern Múnich.
La "canarinha" fue ampliamente superior a Holanda en los primeros 45 minutos y se puso por delante 1-0."El primer tiempo no fue bueno, Brasil fue claramente mejor", agregó."Después controlamos el partido", dijo también Van Bommel".
"El 1-1 fue suerte", admitió también el volante sobre el tanto anotado por Felipe Melo en propia meta.
