Martino dialogó con los medios en la previa del histórico juego ante España.
ReutersJOHANNESBURGO.- El seleccionador de Paraguay, el argentino Gerardo Martino, afirmó hoy, en la previa del partido de cuartos de final del Mundial ante España, que los rivales de la "Roja" se ven siempre condenados a jugar al ritmo impuesto por los ibéricos.
"Imagino que todos deben haber preparado un partido para jugar más lejos del marco, lo que pasa es que España tiene tanto la pelota que no te queda otra que retroceder en el campo, indefectiblemente se juega el partido que España quiere", dijo Martino.
El DT, que ya ha logrado la gesta de meter a Paraguay en los cuartos de final de un Mundial por primera vez en su historia, se mostró convencido de que uno de sus principales problemas no será "cómo mejorar nuestra circulación de balón, sino lo que tenemos que hacer es preguntarnos cómo neutralizar la circulación que tiene España".
Martino reconoció que una de sus principales atenciones será para el goleador español David Villa, aunque "es muy díficil poder neutralizar a un jugador tan en forma". "Tiene una capacidad goleadora y de terminación de la jugada que pocos delanteros tienen", añadió.
Sin embargo, prefirió no individualizar el peligro español: "el problema que tenemos es España y para eso hemos planteado el partido".
El seleccionador de Paraguay, cuya selección sólo ha encajado un tanto en el Mundial, se muestra confiado en sus posibilidades por el hecho de que se trate de una eliminatoria a un solo partido.
"Si tuviera que pensar en un torneo de 20 fechas probablemente serían menores las posibilidades de Paraguay, pero en 90 minutos, no sólo gana el que juega mejor, sino también el que mantiene la compostura, el que tiene deseo, el que tiene corazón, el que sabe que está ante una oportunidad única... eso iguala a los futbolístico", aseguró.
El seleccionador de Paraguay rechazó, no obstante, entrar en la polémica abierta por la designación del guatemalteco Carlos Batres como árbitro para el encuentro contra España.
"No conozco al árbitro que va a dirigir mañana", se limitó a asegurar el "Tata", en referencia a Batres, que fue el árbitro del encuentro de octavos de final del Mundial de 2002 en el que Alemania eliminó por 1-0 a los paraguayos, que reclamaron dos penales.
Su designación ha suscitado airadas reacciones en Paraguay, en las que Martino ha preferido no entrar. El seleccionador de Paraguay también afirmó contar con sus 23 jugadores en condiciones óptimas para afrontar el partido.