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Santiago: Viernes 26 de abril del 2024 | Actualizado 19:03
SANTIAGO.- El intendente de la Región Metropolitana, Fernando Echeverría, el ministro de Obras Públicas, Hernán de Solminihac, y el general de Carabineros, José Luis Ortega, visitaron este jueves los avances del Estadio Nacional.
"Está prácticamente listo", dijeron a coro las autoridades respecto a la reapertura parcial que tendrá el recinto de Ñuñoa el próximo martes, en el duelo entre Universidad de Chile y Chivas de Guadalajara por la vuelta de las semifinales de la Copa Libertadores.
"Hay detalles menores como sacar escombros", apuntó De Solminihac mientras el intendente Echeverría añadió: "Faltan rejas que se están instalando, los puentes para acceder a los fosos, la limpieza del sector externo del estadio, pero puras cosas menores".
En rigor la autorización no fue firmada, sin embargo, las mismas autoridades descartaron que el uso del Nacional para este martes corra peligro. "Tenemos que hacer visitas de rutina y ratificar todo así que esperamos firmar la autorización este domingo", agregó Echeverría.
En tanto, Luciano Rojas, administrador del Estadio Nacional, sostuvo que el uso de la cancha principal "está autorizado" para que Universidad de Chile pueda entrenar allí desde este viernes.
En definitiva el coliseo nuñoino podrá albergar este martes a 37 mil personas. Finalmente sólo se vendieron 33 mil boletos e invitados, dirigentes y medios de prensa se debieran ubicar en algún pequeño lugar de marquesina, que formalmente sigue cerrada por problemas en los 16 pilares del sector sufrido tras el terremoto del 27 de febrero.
Para el duelo entre la U y el elenco mexicano habrá 800 funcionarios de Carabineros más 400 vigilantes privados, costeados por Azul Azul.
Estadio final con 49 mil personas
El cotejo del martes servirá como reapertura parcial del Coliseo de Ñuñoa. Solo a inicios de septiembre, las obras estarán completamente finalizadas. Y en esa fecha, el aforo será de "49 mil personas", reconoció el ministro De Solminihac.
Antes de comenzar el proyecto -que incluyó una inversión de 12 mil millones de pesos- la capacidad era de alrededor de 60 mil espectadores.
"Yo hubiera hecho el proyecto distinto", añadió el funcionario de Gobierno, tomando distancia de la administración anterior. "Hay que ver el tema del techo", sostuvo respecto a uno de los emblemas del nuevo Nacional.
Lo cierto es que este martes ya se podrá ver una nueva fachada del máximo estadio del país. Resaltan las butacas rojas (aunque en buena parte de marquesina serán azules) y la pista de rekortán calipso.
Aún hay 96 butacas "con percepción distinta a las otras que deben moverse, pero no hay problemas", aseguró De Solminihac.
Hernán de Solminihac, hincha de Universidad Católica, señaló que él no se ubica en la vereda de Diego Cagna, DT de Colo Colo quien declaró que espera una eliminación azul.
"Como autoridad de Gobierno le deseamos todo el éxito a la U en este partido", dijo el titular de OO.PP.
"Y como hincha también", complementó al rato.
El mismo fair play, cómo no, esbozó Fernando Echeverría, también fanático cruzado. "Que gane Universidad de Chile", dijo además de asegurar que "no deberían haber problemas" para el eventual uso del recinto en una hipotética final.
En la "otra trinchera" estaba Carabineros. "Mira, la pista es azul... No importa que no tengamos estadio propio. Además si hiciéramos uno deberíamos poner un arco como en Buenos Aires, por tantos hinchas que somos", decía un uniformado azul de corazón, que acompañaba al general Ortega, reconocido seguidor de Universidad de Chile.
