El error de Pinto abrió el camino de las Chivas rumbo a la final.
AP
SANTIAGO.- Lo de Miguel Pinto ayer en el Estadio Nacional confirma una vez más que para ser arquero hay que tener algo especial; hay que estar preparado para pasar caer en picada de una linda nube directo al cemento.
Eso fue lo que sufrió el meta y capitán de la Universidad de Chile ayer en el duelo de vuelta ante Chivas por las semifinales de la Libertadores. Y la prensa mexicana se preocupó de recordarlo.
"Nueve minutos más tarde, su lugar en la gloria se desdibujó, sus guantes terminaron por traicionarlo en el peor momento. Baez sacó un disparo cruzado sin mucho peligro pero con la firme intención de convertirlo en el primer tanto, Pinto se encontró el balón, lo tocó y lo dejó ir en un acto de locura. La redonda cruzó la línea de meta para robarle un segundo de vida al guardameta", publicó
Mediotiempo.
El mismo portal insinuó que ayer Guadalajara estaba en estado de gloria: "Los chilenos no se cansaron de atacar la portería tapatía, pero Chivas fue inmune al peligro, sufrió, sí, pero nada pudo detener el sueño".
En tanto, el periódico
La Afición destacó la contundencia del cuadro tapatío: "El Rebaño Sagrado se metió con la autoridad que le dan los once títulos en México y sacaron un triunfo en la casa de la Universidad de Chile. Ganó por dos goles de diferencia, pero pudieron haber sido cinco".
Récord puso énfasis en la historia: "Será la segunda ocasión en la historia de la Copa Libertadores, que un equipo mexicano dispute la serie final para obtener el trofeo. La primera y única vez, se presentó en el 2001, cuando el Cruz Azul cayó ante Boca Juniors".
"De manera merecida, con personalidad y buen futbol". Esos fueron los adjetivos que el matutino
Milenio utilizó para describir el triunfo de los norteamericanos. Pero como foto, no se olvidan de Pinto: lo muestran, con cara de desesperación, yendo a buscar la pelota dentro del arco tras su grosero error.
