Tiger ya entrena en Whistling Straits, donde se jugará la 97ª versión del PGA Championship.
Reuters
WISCONSIN.- Tiger Woods se siente mucho mejor sobre su forma de jugar que hace unos cuantos días.Woods llegó al PGA Championship luego del peor torneo de su carrera, en el que apenas le ganó a un golfista entre 80 en Firestone, con un marcador de 18 sobre par.
Ahora, Phil Mickelson y Steve Stricker tienen la oportunidad de arrebatarle el primer lugar del ranking en Whistling Straits.
Woods, que ha conquistado en cuatro ocasiones este torneo, dijo el martes que está “frustrado” por su forma de jugar en Firestone, pero señaló que se siente bien por el trabajo realizado desde que llegó al PGA.
Su caddie ha estado sosteniendo la punta de un palo contra la cabeza de Woods para que la mantenga inmóvil durante el swing.
“Mi cabeza se estaba moviendo demasiado para mi swing”, comentó Woods. El estadounidense se prepara para el último Major de la temporada con un entrenador de swing.Sean Foley no es el entrenador de Woods, al menos todavía no. El canadiense trabaja con Huntger Mahan, Sean O'Hair, Stephen Ames y otros golfistas.
Foley dijo que Woods le pidió que observara su swing en la ronda de práctica del martes. En dos hoyos, Foley se paró detrás y al frente de Woods para grabar su swing.Cuando le preguntaron si trabaja con Woods, Foley respondió: “No diría eso. Pero existe la posibilidad”.
Woods jugó con Mahan y O'Hair, al igual que lo hizo en mayo en el Players Championship cuando Foley lo acompañó y provocó rumores de que sería su nuevo entrenador de swing.Después de nueve hoyos, Foley acompañó a Ames.
