EFE
ESMIRNA, Turquía.- No estaba en los planes de nadie, pero la frase "todo puede pasar" -como si se tratara de fútbol- le calzó a la perfección.
España se vio sorprendida por Francia, que llegaba al encuentro con aire de víctima, y que terminó ganando 72-66, este sábado en Esmirna, en la primera jornada del Mundial de básquetbol.
La "Roja" pone en juego el título conquistado en Japón-2006.
Tras una fase de preparación casi impecable, pocos dudaban de un triunfo de los españoles ante un equipo sin estrellas y que había ido de fracaso en fracaso en sus amistosos de las últimas semanas, pero los "Bleus" firmaron un encuentro sólido ante un equipo impreciso y muy torpe en los tiros libres.