Rodick descargándose contra la ''pobre'' juez de línea.
AFP
SANTIAGO.- Andy Roddick no pasa por un buen momento tenístico. A sus 28 años las lesiones lo han complicado y a pesar de que aún es "top ten" algunos ya lo quieren "jubilar".
"A Roddick se le ve viejo y cansado", escribe, pro ejemplo, Greg Garber en la página de ESPN.
Este miércoles se fue como nunca antes, en la tercera ronda del US Open. Y eso le dolió al estadounidense, a pesar del buen nivel mostrado por su rival Janko Tipsarevic.
El tema es que al norteamericano no le cayó bien que lo estuvieran pasando por arriba y descargó toda su ira contra una juez de línea.
Resulta que la mujer sancionó, acertadamente, uno de sus servicios con una falta de pie, pero cometió un error, porque tal vez presa del nerviosismo o simplemente sufrió un ataque de pánico al convertirse en protagonista inesperada de la noche, confundió la izquierda con la derecha y Roddick abusó de su error.
Fue en el tercer set, 5-2 a favor de Tipsarevic, un parcial para cada uno. "Fue con el pie derecho", le dijo la juez. ¿Cómo? "Nunca en mi carrera mi pie derecho ha estado por delante del izquierdo (en el momento del saque)", respondió a voces el jugador.
"¿Por qué no eliges a árbitros que sepan lo que hacen?", se dirigió después al juez de silla, el español Enric Molina "¡Qué es esto, el servicio 800 alquila-un-árbitro?" añadió. Roddick perdió el set y siguió golpeando verbalmente a la señora.
Se retiró luego Roddick al vestuario, dijo que para cambiarse los pantalones, y regresó algo más sereno, dispuesto a reordenar su cabeza, pero Tipsarevic ya lo tenía por las cuerdas y no pudo remontar.
