BUENOS AIRES.- Estudiantes de La Plata y la Liga Deportiva Universitaria de Quito jugarán mañana en Argentina la última final de la Recopa Sudamericana de fútbol, a la que el club ecuatoriano llega avalado por un triunfo por 2-1 en el partido de ida.
El equipo argentino apostará a un sistema más ofensivo para dar vuelta el resultado y levantar la copa, pero para eso deberá enfrentar a un rival decidido a ganar un nuevo título.
"Ganar la Recopa sería realmente histórico", declaró hoy el técnico de LDU, Edgardo Bauzá, en Buenos Aires.
"Lo que menos tenemos que hacer es meternos atrás o jugar lejos del área. Tenemos que presionar mucho porque sino Estudiantes solo nos va a llevar a ese lugar", definió el entrenador, que centró la atención en que su plantel tenga "el control de la pelota".
El técnico de Estudiantes, Alejandro Sabella, decidió en tanto presentar un planteo más ofensivo, jaqueado por la necesidad de goles que reviertan la situación.
Gastón Fernández, ya recuperado de un esguince de clavícula, y Leandro González formarían la dupla atacante del "Pincha", con Enzo Pérez de enlace y un mediocampo fortalecido, a cargo del veterano internacional Juan Sebastián Verón.
Sabella no podrá contar en cambio con el arquero Agustín Orión, que será reemplazado por César Taborda, ni el zaguero Leandro Desábato, ambos suspendidos por la Conmebol para partidos internacionales.
"Tenemos la necesidad de atacar, porque así lo requiere el resultado que nos trajimos de Quito. Aunque debemos tomar los recaudos necesarios y suficientes. Por eso debemos ser inteligentes para ir a buscar la victoria, pero hay que recordar que enfrente tenemos un rival peligroso como lo es Liga, que por algo llegó a esta instancia", declaró la "Brujita" Verón.
Fernández pidió en tanto "paciencia" para "igualar la serie y después ya manejar el partido desde otro lugar". "La Liga es un rival muy duro y que tiene un técnico muy prestigioso que nos va a venir a hacer un buen planteo", advirtió la "Gata" al diario deportivo "Olé".
El partido se jugará este miércoles a las 20:15 de Chile en el estadio José Luis Meiszner de Quilmes, en los suburbios del sur de la ciudad de Buenos Aires.
