ROMA.- "Nunca me presionaron para incidir en el resultado de un partido", declaró este viernes el ex árbitro Pierluigi Collina, al prestar testimonio ante el tribunal que investiga corrupción en el Calcio, a partir del caso Juventus.
Actualmente, el fiscal Stefano Palazzi investiga grabaciones de conversaciones telefónicas que revelarían que Inter también intentó arreglar algunos partidos.
En los estrados de un tribunal de Napoli también compareció hoy el presidente de la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) Giancarlo Abete.
El dirigente expuso ante algunas preguntas sobre cuestiones de administración y gestión de la FIGC, mientras que Collina se explayó sobre los mecanismos de designación de árbitros en el fútbol italiano.
El principal imputado en el juicio es el ex dirigente de Juventus Luciano Moggi, acusado de tratar de acordar anticipadamente el resultado de partidos oficiales. Antonio Giraudo, otro dirigente de la entidad de Turín, ya fue condenado a tres años de cárcel en conexión con este caso, aunque ambos niegan las imputaciones.
Luego de que Juventus fue sancionado deportivamente en 2006, Inter fue declarado campeón, aunque no se descarta que ese equipo pueda perder esa corona también por actos de corrupción.
Otros tres clubes, Milan, Lazio y Fiorentina, también se vieron envueltos en el escándalo y sufrieron sanciones deportivas, justo el año anterior a que el seleccionado italiano ganara el Mundial de Alemania 2006.