Carlos Bueno y su show...
José Alvujar, El Mercurio
SANTIAGO.- El Superclásico aún no termina. Toda la polémica, todo el morbo que trae un partido entre Universidad de Chile y Colo Colo sigue siendo comentario de pasillos. El partido está lejos de finalizar, sobre todo por el empate de Colo Colo después que Javier Cámpora anotara cuando estaba en posición de adelanto; El juez de línea no lo vio, porque estaba ocupado recogiendo el banderín. Pero no fue la única anécdota del Superclásico.
¿Dónde están los paraguas? Varios hinchas escribieron a Emol reclamando por la decisión de no dejar entrar paraguas al estadio. Es que a la hora previa y durante el partido no paró de llover y bien fuerte. Quienes llevaban el implemento debieron entregárselo a Carabineros que juntó un montón de estos en el perímetro del estadio. Parecían ambulantes ofreciendo paraguas en el suelo. Quienes ganaron con esto fueron los vendedores de bolsas plásticas. A $500 se ofrecían en las afueras, con gran éxito.
Sanhueza se enojó: Corría el minuto 84 de partido y Diego Cagna se atreve con un cambio. Manda a la cancha a Javier Cámpora en reemplazo de Arturo Sanhueza. El capitán albo demoró poco en salir, porque justo estaba cerca del medio. Pero menos tiempo pasó para llegar a camarines, sin antes lanzar palabras contra el DT e incluso rechazar la mano amiga de un compañero de la banca. Y luego, tras la ducha, la prensa intentó conversar con él, pero sólo agachó la cabeza y pasó como un camión sobre piedras. ¿Cómo estará hoy?
El show de Carlos Bueno: Universidad de Chile tiene un técnico dentro y fuera de la cancha. En la banca está Gerardo Pelusso y en el campo la lleva su compatriota Carlos Bueno. El atacante uruguayo no sólo conversó todo el partido con Pablo Pozo y aplaudió en su cara la expulsión de Scotti, también dirigió a sus compañeros desde la cancha. Dio instrucciones a cuanto colega se le pasara por el lado. El más requerido fue Rivarola, su compañero de ataque. También tuvieron instrucciones, Eduardo Vargas, Manuel Iturra, Juan González....
La viveza de los pasapelotas: La U ganaba 2-1 y faltaban 5 minutos para el término del partido. Desde la banca de Universidad de Chile salta un ayudante de Pelusso y corre hacia el arco sur, conversa con los pasapelotas de ese sector, los que comienzan de a poco a abandonar el terreno. Lo mismo ocurrió con los adolescentes del otro sector. Sólo un par de muchachos se quedó aguantando la lluvia. En ese momento lo que importaba al local era que los minutos pasaran. Incluso Sebastián Toro encaró a un pasapelotas, porque sin motivo se habían perdido un par de balones...
El partido aparte de Pelusso: La mayoría de la gente quería escapar de la lluvia, pero no el técnico de la U, Gerardo Pelusso, que se vivió un partido aparte. Estuvo todo el encuentro pegado a la raya lateral, se mojó más que los mismos jugadores, gritó todo, pero ni se inmutó. Hoy habría que llevarlo al doctor, no haya agarrado una gripe con tanta agua...
Hinchas perdidos: Como se vendieron pocas entradas para la barra de Colo Colo, no faltaron los hinchas que se avivaron y compraron tickets del sector de la U. El problema es que no se aguantaron y se pusieron a cantar al comenzar el pleito. Resultado: Una pequeña pelea que no pasó a mayores y seis hinchas albos saltando la reja para llegar donde estaba la Garra Blanca. Alcanzaron a arrancar.
