Figueroa debe conseguir que algún equipo le levante el pulgar.
El Mercurio
SANTIAGO.- Marco Antonio Figueroa dejó la banca de O'Higgins con un objetivo claro: volver a entrenar a un equipo mexicano. El Veracruz parecía su destino seguro. Pero no.
El cuadro de la segunda división azteca finalmente no logró llegar a un acuerdo con el chileno. El "Fantasma", según informa la prensa local, habría subido sus pretensiones económicas y la dirigencia no aceptó.
En el lugar de Figueroa los "Tiburones" inmediatamente contrataron a Omar Arellano para hacerse cargo del equipo donde el chileno Carlos Reinoso es vicepresidente.
Ahora el entrenador se arriesga a quedar sin equipo para el comienzo de la temporada 2011. Por el momento estaría negociando un equipo chileno.
Y aunque hace unos días la dirigencia de Universidad de Chile negó contactos, no se descarta que el ex UC pueda llegar al elenco azul para reemplazar a Gerardo Pelusso.
Por ese lugar, Figueroa compite con técnicos como Jorge Sampaoli, Américo Rubén Gallego, Diego Simeone e incluso el audino Omar Labruna.