SANTIAGO.- Rafael Nadal reconoció la semana pasada que este 2010 había sido el mejor año de su carrera, por terminar número uno y llevarse tres Grand Slams.
Pero de todos los torneos obtenidos esta temporada hay uno que le dejó el gusto más dulce, el US Open.
"Ganar el US Open fue más que un sueño. Hice las cosas bien, pero llegué justito de tenis. Desde la primera ronda a la final, mi nivel fue otro", confiesa el español.
Para adjudicarse los cuatro grandes torneos del año, sólo le faltó el Abierto de Australia, donde debió abandonar por lesión en un duelo ante Andy Murray.
Por eso para el 2011 el mejor del planeta quiere una suerte de revancha. "Ganar en Australia es una gran ilusión, una grandísima ilusión. Para pensar en ganar allí, lo primero que debo hacer es entrenarme bien, hacerlo todo bien en diciembre... y así, llegar a Australia habiéndolo hecho todo correctamente. Después, si sale bien... pues muy bien. Si no, lástima", dijo al sitio español As.
¿Qué recuerda de lo que pasó en Melbourne ante Murray, cuando ya va a hacer un año de aquella retirada?
"La que viví en Australia en 2010 fue una situación complicada. Venía de jugar bien, a muy buen nivel, en Abu Dhabi y Doha, y entonces fue cuando me lesioné y tuve que retirarme ante Murray. Retirarse de un partido y un torneo así es algo feo. Viví momentos complicados. Fue un golpe duro".