SANTIAGO.- En España el día de los Reyes Magos (el 6 de enero) es igual o más importante que la Navidad y justo en esa fecha el Real Madrid tenía calendarizado el duelo de vuelta por los octavos de final de la Copa del Rey ante el Levante.
Medio en serio medio en broma, los jugadores merengues, en la previa al partido de ida que se disputó ayer, le hicieron la siguiente oferta a José Mourinho.
"Si ganamos 4-0 podemos viajar el mismo 6 de enero hacia Valencia para jugar y así aprovechar de pasar la noche de Reyes y parte del día con la familia".
Pero el DT portugués, quien desclasificó la anécdota tras el encuentro, dijo que al escuchar la petición "de broma les comenté que si marcaban seis iríamos el día del partido. Y como sólo tengo una palabra, cumpliré lo prometido. Sé que ése es un día importante para los españoles".
Bueno, los jugadores entraron con esa motivación al Santiago Bernabéu y regalaron una clase de fútbol a sus hinchas además de
meterle ocho goles al débil Levante. Dos más que los requeridos por "Mou".
Este hecho toma relevancia porque será la primera vez que el plantel merengue no se concentre una noche antes de un partido desde que el portugués está a cargo del equipo.
