Héctor Mancilla reconoce que su Navidad está marcada por la tristeza

SANTIAGO.- Para muchos la Navidad es reflejo de amor, paz y mucha felicidad, sin embargo, para el delantero chileno eso no es tan así.

El ahora atacante de Tigres de México, quien hace algunas semanas fue comprado al Toluca por un contrato millonario, reconoce que no ha podido olvidar un sentimiento que lo invade en cada época navideña desde hace 14 años, cuando era un estudiante adolescente.

Mancilla contó a Medio Tiempo que el 16 de diciembre de 1996 falleció su abuela tras una inesperada enfermedad. "Recuerdo que ese año no hubo Navidad ni Año Nuevo, ahí quedó marcada mi vida".

Y agrega: "Fue lo peor, un balde de agua fría que te llega a la cabeza y se te vienen todos los recuerdos, pensar que la tienes ahí y que de un día para otro puede dejar de existir; su cáncer era fulminante, nunca más volvería a ver a la mujer que me crío como a un hijo, mi abuelita ya había muerto".

El seleccionado nacional señala que "para mí la Navidad es muy triste, perdí a mi abuelita (materna) justo unos días antes, desde ese momento para mí esta época quedó marcada. Poco a poco uno va tratando de superarlo, pero lo recuerdo como si fuera ayer; se llamaba Lilia del Carmen, ella fue mi segunda madre".

"Me enseñó a ser una persona de bien, tener humildad, cosa que la he podido llevar de la mano con todo después de lo que me llegó de pronto, tan rápido y fácil. Mucha gente se vuelve loca con el éxito o dinero, pero gracias a Dios tuve a ella que siempre me apoyó en ese tema, porque me dejó grabado que si algún día yo llegaba a ser alguien, que fuera la misma persona como lo era antes", afirma el ex Colo Colo.

El ariete contó que su mejor regalo de Navidad "han sido mis hijos: Ángel, Martina, Jonathan y Matías". Y para esta noche espera que el Viejo Pascuero sea más que generoso. "Ojala podamos hacer un buen torneo, que la gente de Tigres esté contenta con este equipo y que podamos levantar el trofeo. Quiero el éxito con el equipo".