Se lanzó con todo el portugués.
AFP
MADRID.- José Mourinho, técnico del Real Madrid, mostró este martes su perfil más agrio en la previa del clásico de Copa ante el Barcelona y aseguró con cierta amargura que será "criticado haga lo que haga".
El Real Madrid recibirá mañana al Barcelona en la ida de los cuartos de final de la Copa del Rey, en lo que será el primer clásico del año 2012. Y Mourinho mostró ante la prensa un discurso breve en el que destacó que "la prioridad es la Liga".
Buena parte de los focos de la víspera están centrados en la alineación de Mourinho, dadas las ausencias de Alvaro Arbeloa y Sami Khedira.
"Si juega Ramos de lateral, me van a criticar porque no juego de central. Si juega Coentrao, me van a criticar porque es zurdo. Si juega ahí Lass, porque sin Khedira tiene que estar en el centro. Si Pepe juega en el medio, van a decir que es central. Si juega Benzema, que no juega Higuaín", se defendió.
Mourinho también se extendió cuándo se le interrogó por lo que se jugaba en este encuentro.
"¿Cuántos títulos tengo que ganar para no jugarme nada como entrenador, 30? ¿Ninguno? Entonces ya está, gracias. En cada partido me juego mi satisfacción personal, mi alegría, estar feliz o triste el jueves. Lo mismo que con el Athletic. No me juego nada más", afirmó.
Además, Mourinho aprovechó la ocasión para realizar una encendida defensa de su jugador Cristiano Ronaldo, criticado por algunos sectores de la propia hinchada del Real Madrid.
"Llevo un año y medio con Cristiano, ha marcado no sé cuántos goles, no sé cuántos 'hat-tricks', con goles decisivos, el título que ganamos (Copa del Rey) fue con un gol suyo. Pero su partido que más me ha gustado fue su segundo tiempo ante el Mallorca. Me sentí orgulloso de él", comenzó.
Y prosiguió su argumentación: "Un jugador que está acostumbrado a ser la estrella, a marcar, a ser el hombre de la portada, ante el Mallorca, sin jugar bien, trabajó como un animal, recuperó balones, trabajó en defensa. Estuvo fantástico. Le he dicho que trabajando así, nadie le toca".
Mourinho concluyó la defensa de su estrella con un desafío a la prensa: "Y si alguno le quiere tocar, vamos a tener un problema, porque yo no le voy a dejar. Trabajando así, no tiene que hacer goles, no tiene que ser el hombre del partido".
El técnico portugués volvió a insistir en que la Copa no es este año una prioridad para el Real Madrid, actual campeón, aunque sí aseguró que el equipo lo dará todo.
"La Copa es el tercer objetivo, pero es el partido que tenemos mañana. Lo que no es prioritario hoy sí lo será mañana. Mañana no jugamos Champions ni Liga, jugamos Copa y nadie juega para perder", destacó.
