Príncipe saudí estaría interesado en adquirir equipo de Bielsa en Francia

PARÍS.- El príncipe Al-Walid Bin Talal Bin Abdelaziz Al Saoud, nieto del unificador de Arabia Saudí, 35a fortuna mundial según la revista "Forbes", está interesado en adquirir el Olympique de Marsella, que dirige Marcelo Bielsa, para competir con los dueños qataríes del París Saint-Germain.

Según el diario "L'Équipe", el millonario saudí está dispuesto a invertir entre 100 y 200 millones de euros (123 y 309 millones de dólares) en el club de la segunda ciudad francesa, frente a los 70 millones (US$ 86,7 millones) que Qatar Sports Investments pagó en 2011 para adjudicarse el PSG.

Al-Walid está muy ligado a la Costa Azul y a Marsella, donde posee villas veraniegas y pasa largas temporadas del año, según el rotativo.

Además, es comendador de la Legión de Honor francesa desde que le impusiera esta distinción Jacques Chirac en 2006.

El príncipe saudí, de 59 años, se siente en deuda con la ciudad mediterránea porque en uno de sus hospitales salvaron de la parálisis a uno de sus hijos después de que sufriera un accidente cuando practicaba jet ski en 1993, según "L'Équipe".

El proyecto de compra llega en un momento particular del Marsella, líder del campeonato local gracias al juego sólido y vistoso aportado por Bielsa, pero con pocos medios financieros y enredado en un escándalo de corrupción en los fichajes.

El DT argentino se ha quejado en varias ocasiones de que el club no ha accedido a sus peticiones en términos de fichajes.

El presidente, Vincent Labrune, pasó la semana pasada una noche en los calabozos de la policía junto con su director general, Philippe Pérez, en medio de una investigación sobre presuntas irregularidades en el fichaje de varios futbolistas, entre ellos su delantero Pierre-Alain Gignac.

La actual propietaria, la multimillonaria Margarita Louis-Dreyfus, heredera del empresario que compró el club a Bernard Tapie, no se opone a la venta, cansada de inyectar dinero -20 millones de euros el pasado verano- sin obtener resultados deportivos, a condición de que el comprador venga con un ambicioso proyecto deportivo bajo el brazo.

Al-Walid está dispuesto, según "L'Équipe", a salir de la sombra mediática de su yate de 86 metros para cobrar popularidad, como demuestra que en junio de 2013 denunciara a "Forbes" por considerar que había subestimado su fortuna en un 50%.

Propietario de lujosos hoteles en todo el mundo, entre ellos el George V de París, accionista de Appel o de Euro Disney, el pasado verano puso la primera piedra del que será el rascacielos más alto del mundo, un edificio de 1.001 metros de altura que se construye en la ciudad saudí de Yeda, cuyo costo estimado de 1.201 millones de dólares financia con fondos propios.